Las inversiones inmobiliarias son una de las alternativas preferidas por los argentinos que, en la mayoría de los casos, adquieren propiedades para alquilar y así obtener ingresos todos los meses de forma pasiva.
De acuerdo con los reportes inmobiliarios, el retorno de la inversión en dólares es de 2,5% aproximadamente, es decir, muy bajo en relación a otros países y prácticamente igual a la inflación que sufre la moneda norteamericana.
Por otro lado, también hay que contemplar costos ocultos, comisiones inmobiliarias, seguros, impuestos y otros gastos de mantenimiento. A eso se suma la posibilidad de tener el inmueble desocupado, con la consiguiente pérdida de ingresos por el tiempo en que la propiedad permanezca sin inquilino. Es decir, el retorno de la inversión podría ser aún más bajo de lo esperado.
En el mundo de las inversiones existen opciones más rentables dentro del sector inmobiliario. Por ejemplo, adquirir un inmueble por debajo de su valor, hacerle mejoras y vender o, también, comprar un terreno y construir, ya que el precio de construcción está en mínimos (en moneda dura).
Opciones financieras
Sin embargo, existe otra alternativa mucho más eficiente, conocida como REITs, los Real Estate Investment Trust. Se trata de sociedades o fondos que invierten en desarrollos inmobiliarios en todo el mundo y cuyas acciones cotizan en la Bolsa de Valores de Estados Unidos.
Estas empresas obtienen beneficios por medio del alquiler de propiedades como oficinas, hoteles, grandes complejos turísticos, centros comerciales o industrias, entre otros. Las ganancias obtenidas por la sociedad son distribuidas entre los inversores y les permiten acceder a proyectos inmobiliarios muy grandes, con un capital razonable y brindan una rentabilidad proporcional al aporte.
En este sentido, los REITs no buscan obtener rendimientos por la revalorización del inmueble, sino por medio de la renta que se desprende de los alquileres, es decir, se participa de las ganancias que arrojen estos desarrollos en concepto de renta.
De esta manera, el inversor obtiene acceso a un sector que le sería inaccesible de otro modo, por las propias limitaciones del mercado, entre las que se puede mencionar el monto necesario para operar, la poca liquidez y los costos operativos. Los REITs disponen de condiciones específicas que garantizan al inversor el retiro anual de hasta el 90% de la renta generada, entre otros derechos según esté estructurado su contrato.
Además, conviene considerar que en la última década este tipo de instrumentos consiguió un desempeño superior a los principales índices bursátiles, como ser el S&P 500 de Estados Unidos. Así, por ejemplo, este año el indicador incrementó su valor en un 15% mientras los REIT acumulan cerca de 30%.
Esta alternativa de inversión es la más sofisticada y la más eficiente, en tanto habilita la inversión en inmuebles en todas las partes del mundo y permite diversificar entre distintas empresas y rubros con la seguridad de tener liquidez constantemente, ya que se puede cerrar la posición en cualquier momento vendiendo la participación directamente en la Bolsa de Valores.