En las últimas semanas, varios sitios de internet dieron cuenta de la "explosión" de algunos iPhone en el continente europeo, algo que la propia compañía Apple reportó a la Comisión Europea, aunque alegando solamente muy pocos casos.
Ahora, la comisión decidió pedirle al gigante informático explicaciones sobre los problemas técnicos que causarían que en algunos de sus equipos celulares exploten las pantallas. Hasta el momento, los incidentes se reportaron en Francia, Alemania y Gran Bretaña. De hecho, una funcionaria de la Comisión, aseguró que si uno de esos países llega a declarar que estos productos son peligrosos, se pedirá la retirada del mercado de comercialización.
Si bien el número de casos es pequeño, las repercusiones mediáticas han sido impactantes, por lo que la empresa creada por Steve Jobs, decidió salir rápidamente a rechazar cualquier posibilidad de que el problema surja de un defecto de fábrica. Fuentes oficiosas lo relacionan con la batería del aparato, pero según voceros de Apple, el inconveniente pudo haber surgido luego de que los teléfonos hayan sido expuestos a una presión exterior producto de un golpe.