El titular de la cartera nacional de Transporte, Mario Meoni, hizo hincapié en que la utilización de combustibles alternativos puede servir para “incentivar nuevas industrias”.
El ministro de Transporte de la Nación, Mario Meoni, ratificó la decisión del Gobierno nacional de “avanzar en la innovación de nuevas fuentes de energía” en el transporte público, pero indicó que “la preocupación es trabajar con fundamentos científicos”.
Lo hizo luego de haber mantenido junto a su par de Ciencia y Tecnología, Roberto Salvarezza, una reunión con las autoridades de la empresa Y-Tec e investigadores del Conicet para dialogar sobre el uso de hidrógeno en el transporte.
Meoni se mostró “entusiasmado” con el trabajo consensuado para la utilización de nuevas energías para la movilidad que están siendo investigadas y desarrolladas por Y-TEC, junto a investigadores del Conicet, a quienes transmitió su voluntad de redirigir recursos para invertir en prototipos y proyectos a largo plazo.
Analizaron, básicamente, dos aplicaciones: la propulsión del vehículo y la producción eléctrica para servicios secundarios a bordo del vehículo como la climatización, sistemas de comunicación, sistemas electromecánicos del vehículo u otros servicios.
NUEVAS INDUSTRIAS
En ese contexto, Meoni remarcó que se pretende “avanzar en la innovación de nuevas fuentes de energía en el transporte” porque entienden que “puede ser una manera de incentivar nuevas industrias“.
“Tenemos naturalmente recursos disponibles que volcamos todo el tiempo en materia de combustibles fósiles y que, más allá de que podamos tener esos combustibles como el gas natural en el GNC o GNL en muchas zonas, queremos impulsar esa conversión en transporte público pensando en algo nuevo a largo tiempo”, aseguró el funcionario.
En este sentido, destacó que la preocupación es “trabajar con fundamentos científicos” y agregó que “hoy hay una tendencia de imponer un micro eléctrico urbano a cualquier costa y eso tiene un costo enorme, porque los que hay son 100% importados, valen 450 mil dólares, contra uno de 150 mil que funcionan con gasoil o 200 mil en GNC”.
Por su parte, Salvarezza aseguró que ellos van a sumar “todas las capacidades tecnológicas para que el producto que uno pueda desarrollar tenga la mayor integración nacional, el mayor conocimiento tecnológico y armaremos consorcios que estén aportando en aquellos aspectos que necesiten I+D”.
Télam