Un informe realizado en diferentes escuelas públicas y privadas de diferentes ciudades de Santa Fe por la organización Docentes por la Educación y la Fundación Pensar marcó un alarmante dato sobre el estado de situación en la educación provincial. Luego de una reunión mantenida entre las partes, el diputado nacional Federico Angelini presentó el estudio y destacó su preocupación.
“Esto no es de hoy, no es de esta gestión solamente. La educación en Santa Fe viene cayendo desde hace unos años y todas las evaluaciones realizadas marcan esa caída. Nos encontramos con una escuela pública con muchos problemas de infraestructura, que no pudieron dar clases por falta de gas y que no tienen las condiciones mínimas para hacerlo”, expresó Angelini.
De acuerdo a lo mostrado por el estudio, el 94% de los docentes afirmó que la educación en la provincia no genera hábitos de estudio, esfuerzo ni autosuperación en sus alumnos, así como también el 82,3% aseguró que es habitual que los alumnos promuevan de año sin haber aprendido los conocimientos del mismo. Además, casi el 62% consideró que en Santa Fe no hay un buen clima áulico y orden escolar, mientras que casi el 40% aseveró haber sido testigo o víctima de situaciones de violencia grave o traumática en el ámbito escolar.
“Nos encontramos con un nivel de contenido que no está adaptado al siglo XXI, no salen preparados para el mercado laboral ni para el nivel superior de educación. El resultado de las pruebas aprender fue negativo con respecto al del 2018, lo que marca una clara caída en matemáticas y en lengua”, continuó el funcionario.
Buscando una solución, el referente de Juntos por el Cambio explicó: “Lo que proponemos es trabajar ahora, esta situación no va a cambiar de un día para el otro. Tiene que haber políticas de educación que vayan más allá de quien sea gobierno. Nosotros no queremos hacer campaña para el 2023, si no todo lo contrario, queremos que se empiece a abordar ahora”.
“La infraestructura es lo más urgente para solucionar. Tenemos escuelas que no dieron clases en invierno por falta de gas, cuando las tuviste un año y medio cerradas. Yo estoy en contra de no haber dado clases, pero no se hizo nada tampoco. No hay políticas pensadas, si vuelve a pasar algo así la única respuesta va a volver a ser cerrar los establecimientos”