Quince años después la Selección Argentina volvió a ganar en La Paz, jugando contra sus propios conflictos generados por la altura, lo de Scaloni sacaron un aprobado enorme para ganar su segundo partido consecutivo y encabezado las eliminatorias tras las primeras fechas dos fechas.
Los próximos rivales llegarán a mediados de noviembre y serán Paraguay de local y Peru en Lima.
El encuentro comenzó como se lo esperaba, una selección nacional tratando de hacerse fuerte, buscando evitar las imperfecciones en los pases propias de los equipos desacostumbrados a jugar en la altura y Bolivia sabiendo que las oportunidades iban a llegar tarde o temprano. La primera la tuvo el equipo de Scaloni con un remate de Paredes de media distancia desviado.
Se notaba a las claras que mientras pasaban los minutos los jugadores argentinos sentían y mucho la falta de aire y allí aparecieron los locales cuando a los 22 minutos el primer centro que cayó en el área Argentina Martins no pudo conectar de la mejor manera pero un minuto después, Chumacero desde la izquierda con un centro al corazón del área lo encuentra en total soledad a Martins que esta vez no falla y pone arriba a Bolivia.
Cuando parecía que el equipo local aprovecharía el momento psicológico y físico, la Albiceleste comenzó con espasmos a arrimarse lentamente al área rival, cuando faltaban cinco minutos para el final de la etapa, Paredes con un remate soberbio a la salida de un córner metía la pelota en el palo y faltando un minuto para el final, una corajeada de Lautaro Martínez, quién después de un rebote puso el empate merecido en un encuentro ante dos rivales, Bolivia y su altura.
Golpe a golpe
La segunda etapa comenzó con un golpe a golpe entre los dos equipos buscando de contragolpe encontrar la diferencia, la sensación de superioridad Argentina solamente se veía bloqueada por la falta de oxígeno que no le permitía, sobre todo a Martínez, definir con efectividad.
Pero faltando diez minutos, una recuperación de Messi, quién juega rápido a Martínez, y el delantero del Inter, ya sin confianza para el remate personal, le puntea la pelota para que Joaquín Correa, con un zurdazo cruzado, le de la ventaja a los de Scaloni. Fue un golpe demasiado duro para el local que nunca se pudo recuperar.
La figura
Gran partido de Exequiel Palacios, que jugó todo el encuentro sin notarse casi la falta de aire, Messi con ráfagas de lo que ya conocemos, y un partido extraño de Martínez que tuvo todo para ser la figura pero hoy la mira no estaba centrada para que la diferencia sea mayor.
En definitiva seis puntos de seis en las dos primeras jornadas para un plantel de Scaloni que comienza a dar pasos al frente.