Los fiscales elevaron la causa a juicio con la madre de la víctima y su pareja imputadas como coautoras del hecho.
Los fiscales que investigaron el crimen de Lucio Dupuy, el niño de 5 años abusado sexualmente y asesinado a golpes en noviembre pasado en la ciudad pampeana de Santa Rosa, elevaron la causa a juicio con la madre de la víctima y su pareja imputadas como coautoras del hecho, informaron fuentes judiciales.
Los fiscales Máximo Paulucci, Marcos Sacco y Verónica Ferrero dieron esta mañana una conferencia de prensa en la que brindaron detalles sobre el cierre de la instrucción del expediente por el asesinato del nene. Paulucci recordó que fueron “seis meses de investigación”, la cual estuvo a cargo de un equipo de instructores judiciales que han presentado su “acusación” y “teoría del caso”, que tiene una “expectativa punitiva de máxima”, es decir, la prisión perpetua.
En conferencia de prensa se indicó que la imputación es por el abuso sexual agravado del niño, en concurso real con el homicidio calificado no solo por el vínculo, en el caso de la madre, sino también por “ensañamiento y alevosía”. “Creemos que las pruebas que hemos reunidos son suficientes para acreditar estos delitos”, sostuvo la fiscal Ferrero.
A partir del pedido del Ministerio Público Fiscal (MPF), la Justicia de Control deberá realizar una audiencia en la que las diferentes partes presentarán las pruebas, tras lo cual, la Oficina Judicial fijará la fecha de inicio del debate, que podría ser este año o el próximo, según estimó la instructora.
A su vez, el MPF señaló que ellos propusieron unos 50 testigos, entre otras pruebas y descartaron la participación de “terceras personas” en el hecho. A su turno, el fiscal Marcos estimó que el debate se llevará a cabo en Santa Rosa y que durará “entre quince y veinte días”.
En tanto, las acusadas Magdalena Espósito Valenti (madre de Lucio) y su pareja, Abigail Páez, continúan detenidas en una unidad penal de la provincia de San Luis. En febrero de 2022, el MPF amplió la imputación de ambas y al delito de homicidio le sumaron el de abuso sexual triplemente agravado.
De esta manera, Espósito Valenti quedó acusada por “homicidio triplemente calificado por el vínculo (por ser ascendiente) y con ensañamiento y alevosía; en concurso real con abuso sexual gravemente ultrajante por su duración y formas concretas de realización, triplemente agravado por ser la guardadora al momento de los hechos, por ser cometido por dos personas y por existir convivencia con la víctima menor de 18 años, como delito continuado”.
Mientras que a Páez se la acusó del delito de “homicidio doblemente agravado, por ser con ensañamiento y alevosía; en concurso real con abuso sexual gravemente ultrajante por su duración y formas concretas de realización, triplemente agravado por ser la guardadora al momento de los hechos, por ser cometido por dos personas y por existir convivencia con la víctima menor de 18 años, como delito continuado”.
Lucio falleció el 26 de noviembre último a raíz de una golpiza que sufrió en la vivienda en la que residía junto a su madre de 24 años y la pareja de esta, de 27, quienes quedaron detenidas inmediatamente.
Tras su muerte se determinó que el niño había sido asistido al menos cinco veces en un lapso de tres meses por politraumatismos en distintos centros asistenciales de La Pampa, aunque no había denuncias de profesional alguno al respecto, como así tampoco de las autoridades del jardín de infantes al que asistía.
Por tal motivo se inició una investigación administrativa a nivel gubernamental para establecer responsabilidades de funcionarios en la omisión de denuncias que pudieron haber evitado este desenlace.