Claudia Acuña respira y transmite jazz desde que tiene uso de razón. Tras un impasse en su carrera, presentó “Turning Pages” de manera independiente. El disco fue nominado a los Latin Grammy 2019 como “Mejor Álbum de Jazz”, siendo a su vez la única mujer en la categoría.
Hace algunos días lanzó el videoclip de “Agüita de corazón”, la primera canción del álbum. Un canto a la calma y la empatía que se necesita en estos días de caos mundial.
“Mi vínculo con el jazz fue una suerte de accidente. De muy pequeña y con la situación política de Chile, recuerdo que pasaban muchas películas de musicales y así conocí por ejemplo a Louis Armstrong, Duke Ellington, Billie Holiday, Frank Sinatra… que eran todos de una generación de jazz”, recordó la artista en diálogo con IMPULSO.
Y agregó: “En la radio, cuando buscaba emisoras o canciones, me fui dando cuenta de que todas iban hacia la línea del jazz, y una vez cantando en una actividad del colegio un señor me dijo ‘A ti te gusta el jazz, tienes un mundo que descubrir'”.
Así fue que se puso a buscar, se contactó con gente de su ciudad relacionada al género y se anotició de que eso que tanto le gustaba “tenía nombre y apellido”. Con distintas experiencias a lo largo de su carrera, rememoró aquel día en que “esta sureña” se subió tímidamente a cantar en un escenario y de repente, con un gran silencio en la sala, el mundo se abrió para esta gran artista. Aunque, claro, existieron situaciones en donde se sintió expuesta o que debió “pelearla más” por el simple hecho de ser mujer. Una lucha que, de a poco, va ganando más batallas.
“TURNING PAGES”, RENACER COMO EL AVE FÉNIX
“Del fuego de la ceniza, vuelve esta Claudia envuelta en su esencia y con plumas nuevas. Más fuerte, más grande y más completa“, dice la artista al referirse a un disco que nació tras una década de impasse. En el medio, un embarazo, un matrimonio y posterior divorcio “súper doloroso” en donde existió el abuso doméstico.
“Todavía me cuesta hablar de por qué tuve tanto silencio. Además, en muchas entrevistas se le echó la culpa a la maternidad y la verdad es que es súper injusto. Si bien la maternidad necesita un silencio y un espacio para la crianza, todos tenemos derecho a tener esos meses de acostumbrarnos a nuestros bebés pero después poder volver a trabajar”, destacó, mientras recordaba cuánto le dijeron que, por el embarazo, era el fin de su carrera. “No se nos debería negar la opción de ser madres y trabajar”, sentenció.
En torno al disco, indicó: “Cuando me decidí a levantarme me di cuenta que tenía que partir prácticamente de cero. Además, se me ocurrió hacer ‘Turning Pages’ como independiente. Pedí que lo produjera mi gran amigo, colaborador y guitarrista de mi disco, Juanchi Herrera y lo lanzamos empujándolo a pulso sin ningún sello”. Y así llegó el reconocimiento a tamaño esfuerzo: “Salimos nominados a Mejor Álbum de Jazz por los Latin Grammy, siendo a su vez la única mujer nominada en mi categoría”.
A su vez, participó en la apertura del Festival de Viña del Mar 2019. Sobre ello, manifestó: “Primero me da orgullo como chilena porque mi pueblo me dio el espacio para conocerme. Por otra parte, siento que fue sacar el estigma que tiene el jazz como que no es música popular, y la verdad es que se bailaba en algunas épocas así como hoy se bailan otras cosas”. Compartió escenario con Beto Cuevas (La Ley), Juri, Isabel Parra, entre otros destacados músicos. “Fue una emoción enorme”, sostuvo.
“AGÜITA DE CORAZÓN” PARA CALMAR LAS PENAS MUNDIALES
La artista presentó el videoclip de “Agüita de Corazón”, el primer track de “Turning Pages”. Reflexiva, nos contó que decidió lanzarlo en este momento, como buena chilena que “da tés para cualquier dolor, y que incluso existe una agüita quitapenas”.
Aquí y ahora, en un presente un tanto catastrófico para la sociedad mundial, Claudia nos invita a pensarnos pero, sobre todo, a acompañarnos y abrazarnos. “Con todo esto, nos hemos dado cuenta de lo vulnerables que somos. Esto le puede pasar a cualquier persona más allá del estatus económico, de la raza, religión, del país donde viva. Nos obliga a tener más humanidad, empatía y solidaridad“, expresó.
Y concluyó: “Esta agüita, calentita, nos invita a tomarla de a sorbos y decirnos que respiremos, que nos calmemos y nos conectemos con el presente. Esta agüita ayuda a que nos sentemos con nosotros mismos y nos acurruquemos para calmarnos”. Con ganas de continuar componiendo para un próximo material y el plan de realizar un concierto digital a fines de año, la artista nos deja este gran material. ¿Ya lo viste?