Impulso

El Manchester City inició la construcción del que será el primer estadio de fútbol dentro del metaverso, la nueva forma de entender Internet que pretende lograr la inmersión completa y multisensorial del usuario a través de la realidad virtual y diferentes dispositivos.

Junto a Sony y su tecnología Hawk-Eye, quieren recrear digitalmente el Etihad Stadium a través de un análisis de imágenes y seguimiento de esqueletos, lo que permitirá que los aficionados puedan explorar el campo y ver partidos en vivo desde la comodidad de su hogar.

El club citizen firmó un acuerdo de tres años con el gigante tecnológico para convertirse en pionero dentro de la Premier League. Y aunque el proyecto todavía está dando sus primeros pasos, varios equipos de expertos ya visitaron las instalaciones para mapear el estadio de manera digital y poder llevar a cabo la recreación en realidad virtual.

Además, están explorando otras ideas como la posibilidad de que los hinchas se reúnan con los jugadores en el metaverso a través de sus avatares, que interactúen entre sí e incluso que puedan comprar productos que ni siquiera están disponibles en la vida real.

“El punto que podríamos imaginar de tener un metaverso es que puedes recrear un juego, puedes ver el juego en vivo, eres parte de la acción de una manera diferente a través de diferentes ángulos y puedes llenar el estadio tanto como quieras, porque es ilimitado, es completamente virtual”, explicó la directora de marketing del City. “También tienes el control de lo que quieres ver en ese momento. No hay un punto de vista de transmisión, puedes verlo desde cualquier ángulo del estadio. El cielo es el límite”.

Por el momento, la experiencia que se puede conseguir en este ámbito es limitada porque solo se puede acceder al metaverso con controladores manuales y unos auriculares. Pero según los expertos, en el futuro los aficionados podrían ver un partido real dentro de un estadio virtual, lo que podría transformar los derechos de retransmisión puesto que serían los propios clubes los que podrían poner a disposición del público los partidos en sus propios metaversos dejando de lado los megacontratos de televisión.

“Creo que la imagen tradicional de alguien sentado en un sofá mirando una pantalla es algo que no podemos imaginar que seguirá siendo la realidad, ni siquiera dentro de diez años”, continúa Tarre.

Una economía autosuficiente

“La definición estricta de un metaverso es que se convierta en una economía autosuficiente”, expresa Tarre. Y como ejemplo sirve Fornite, un videojuego al que se podía jugar totalmente gratis pero cuya empresa ganó miles de millones gracias a las compras que ponían a disposición de los jugadores, como accesorios o personajes.

“Podemos probar el apetito de los aficionados comprando cosas en este universo. ¿Cómo van a comprarlo? ¿Con dinero real? ¿Con criptomonedas? Todavía no sabemos hasta dónde vamos a llegar”. Por ahora, dieron el primer paso: “construir un entorno en sí mismo, un Etihad Stadium virtual que será similar al actual pero probablemente más futurista”.