Con la llegada del frío a Rosario, cuáles son las recomendaciones para evitar la pérdida de gas

Andrés Romagnoli, vocero de Litoral Gas, dialogó con la prensa para dar las recomendaciones para evitar la pérdida de gas en las casas y la prevención de la intoxicación por monóxido de carbono.

El frío llegó a Rosario y con él, las estufas comenzaron a prenderse de a poco. Andrés Romagnoli, vocero de Litoral Gas, dialogó con la prensa para dar las recomendaciones para evitar la pérdida de gas en las casas y la prevención de la intoxicación por monóxido de carbono.

El monóxido de carbono es un gas que es invisible, que no tiene olor, que no tiene color, no es humo, y es un gas muy tóxico, que lo que genera es un adormecimiento progresivo que puede generar después en algún momento náuseas, en algún momento perdida de conocimiento y hasta llegar a ser fatal”, comenzó manifestando.

De esta forma, es importante prevenir la generación de este gas. Este gas no es gas natural, es un gas que se genera cuando hay una mala combustión. Puede ser por una combustión en un bracero, en una estufa leña o en gas natural.

“En el caso de gas natural, lo que nosotros estamos haciendo hincapié es a tener siempre presente que todos nuestros artefactos a gas tienen que tener la llama azul. O sea, la llama azul clásica de gas natural, si por algún motivo encontramos que esa llama no es azul, está generando monóxido de carbono y puede ser peligroso“, aclaró.

Por su parte, sumó: “Si la llama es amarilla, naranjada, roja, algo no está funcionando bien y es importante hacer revisar ese aparato en sí. Lo mismo si encontramos paredes tiznadas con manchas marrones o negras, eso quiere decir que no está quemando bien algún aparato y por lo tanto requiere justamente alguna acción puntual”.

Además, es importante la ventilación: “En el caso de que se esté generando gas de este tipo, es muy importante y por eso siempre hablamos mucho de la ventilación y a veces tenemos algunos malos entendidos en el sentido de por qué tanto lío por una rejillita. Bueno, las rejillas están normatizadas para que pase determinada cantidad de metros cúbicos de aire por minuto de manera de asegurar que si hubiera una situación de riesgo, ese gas se evacúa hacia el exterior del ambiente donde estamos”, comentó.

¿Abrir unos centímetros alguna ventana es también necesario, si no hay esta rejilla? Puede ser. Si las rejillas están funcionando bien, si no están obstruidas, si no tienen un nido de pájaro afuera, un cuadro adelante o no están metiéndose adentro un caño de aire acondicionado, no hace falta. O sea, las rejillas están pensadas para que el aire circule normalmente. Ahora, por eso tenemos que tener en cuenta que esto no pase, que las rejillas no estén obstruidas, que estén funcionando bien. Lo mismo lo que implica los tirajes de un calefón, un calefactor, un calefactor de tiro balanceado”, continuó.

“Todo lo que podemos hacer para prevenir y por eso recomendamos una vez por año hacer una revisión con un gasista matriculado de la instalación, nos quedamos tranquilos, más allá de la generación de monóxido también que la instalación no tenga ninguna fuga de gas natural en sí que también es una condición importante y nos quedamos tranquilos teniendo en cuenta que justamente el gas natural es un combustible que nos genera un gran bienestar con condiciones importantes para el invierno pero que hay que manejarlo con cuidado, con seguridad”, cerró.