La ministra de Salud santafesina se inclina por medidas “con principio y fin” para detener el avance de la segunda ola de coronavirus, a la que definió como “más intensa y más dura” que la primera.
La ministra de Salud de Santa Fe, Sonia Martorano, se mostró a favor de implementar medidas restrictivas a la circulación de personas a través de “un corte pequeño, con principio y fin”, en el marco del crecimiento de casos de coronavirus en el país.
“Debería ser un corte pequeño, con principio y fin”, sostuvo la funcionaria santafesina, para aclarar que esa decisión corresponde al Gobierno nacional.
Santa Fe adhirió al Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) firmado por el presidente Alberto Fernández, que estable horarios de circulación en la vía pública y realiza controles nocturnos para su cumplimiento.
La ministra de Salud puntualizó en declaraciones a radio LT8 de Rosario que “la responsabilidad individual es la que está faltando” en materia de cuidados preventivos, y se preguntó: “¿Qué es lo que hace falta para tomar conciencia?”
Según Martorano, “la franja etaria media es la que más se está contagiando y se ven cuadros más graves en gente más joven, aún sin comorbilidades“.
La provincia de Santa Fe reportó este martes 1.830 contagios diarios de coronavirus, de los cuales 280 se registraron en la ciudad capital y 559 en Rosario, las dos localidades más pobladas del distrito.
Si bien esos guarismos aún no alcanzan a los 3 mil positivos diarios a los que llegó la provincia en octubre pasado, la ministra dijo que le “preocupa muchísimo por la distancia y la comunicación lo que ocurre en el Gran Buenos Aires”.
Explicó que esta preocupación se debe a que “la comunicación es muy fluida, son 8.500 los vehículos que pasan por el peaje de General Lagos (en la autopista que une las ciudades de Buenos Aires y Rosario), de manera que lo que ocurre allí tiene un delay, pero llega a la provincia“.
“Lo que vemos en los testeos es un aumento de casos con un nivel de contagiosidad más acelerado”, abundó la ministra.
Por último, sostuvo que “hay una gran diferencia con la primera ola” al señalar que la actual se presenta “más intensa y más dura”.
Télam