[Crítica] *El Planeta de los Simios 2*: una confrontación con poco sentido

La película entretiene, pero no conmueve. Y si uno la compara con su predecesora, estamos ante un producto inferior

Cuando se estrenó El Planeta de los Simios: (R)evolución en 2011, no había demasiado entusiasmo previo de la crítica, aunque las imágenes que se habían podido ver en los anticipos privados y en los trailers adelantaban que se trataría de un buen relanzamiento de la franquicia.

Y realmente fue una grata sorpresa. Con el protagónico de James Franco y la dirección de Rupert Wyatt, se presentó una historia creíble desde el primer minuto, con un gran manejo de los efectos especiales, un guión sólido, una fresca paleta de colores y una historia que llegaba a emocionar al ver la relación entre el pequeño César y el personaje interpretado por Franco, y como el bebé simio crece hasta convertirse en un líder.

“El Planeta de los Simios: Confrontación”, dirigida por Matt Reeves,pone todo su peso en una pelea “innecesaria” entre humanos y gorilas, con una trama que aunque intenta en varias ocasiones tocar algunas fibras de nuestra sensibilidad, queda a mitad de camino.

Sin actores de renombre (Jason Clarke), la apuesta fue apoyarse en los efectos especiales, generando un profundo realismo de los simios en casi toda la película, pero distorsionado con algunas escenas grotescas en los momentos de batallas.

Y léase grotesco, tal como lo explica la Real Academia Española: ridículo y extravagante.

La cinta fue filmada básicamente con tecnología digital, y en escenarios naturales de New Orleans (Estados Unidos) y los maravillosos paisajes de la Columbia Británica de Canadá, que no fueron aprovechados ni por la dirección ni por los responsables de fotografía del filme.

La historia entretiene, pero no conmueve. Y si uno la compara con su predecesora, estamos ante un producto inferior.

Por Norberto Sica, director editorial de #IMPULSO
(Seguir en Twitter para más noticias sobre Cine, Publicidad y Tecnología)