[Crítica] *The Amazing Spider-Man 2*: un Hombre Araña más romántico pero no menos sorprendente

Andrew Garfield y Emma Stone son los protagonistas centrales de “La Amenaza de Electro”, logrando un film con un encanto particular

Nunca vi con buenos ojos a la trilogía de “El Hombre Araña” llevada adelante por Sam Raimi en 2002, 2004 y 2007. Ni la forma de encarar la historia ni el rol dado a Tobey Maguire para representar a Peter Parker lograron generar un producto 100% sólido, más allá de las muy buenas recaudaciones en la taquilla global.

Afortunadamente en 2012, Marvel y Sony decidieron relanzar la franquicia, con nueva dirección y protagonistas, y “El Sorprendente Hombre Araña” consiguió tener un protagonista a la altura del personaje: Andrew Garfield, un actor que, desde la sencillez de una sonrisa o una mirada, logra -al igual que la hermosa Emma Stone- traspasar la pantalla.

En “El Sorprendente Hombre Araña 2: La Amenaza de Electro”, Marc Webb apostó a contar una historia más cercana a Peter Parker que al superhéroe. El comienzo del film, ya marca el rumbo que seguirá la cinta en sus dos horas y 22 minutos de duración. Sus padres, quienes lo abandonaron de niño, son atacados en un avión privado mientras intentan escapar con un secreto que se develará promediando la película.

Luego, mientras Peter intenta llegar a su graduación, deberá enfrentarse a unos delincuentes, y, desde allí, se dará cuenta del peligro en el que pone a su novia.El personaje de Electro, no es el villano tradicional, y a pesar de estar menos tiempo en escena de lo que se esperaba, cumple su rol. Mucho más relegado quedó El Duende Verde, con una batalla que se resuelve en pocos minutos.

“La Amenaza de Electro” cuenta con muchos gags, situaciones divertidas y una permanente bajada de línea de buenos valores, casi como si Disney estuviera detrás.

“The Amazing Spider-Man 2” tiene un encanto particular, generado por la química entre Garfield y Stone. Y la estrategia de darle atención a los pequeños detalles en los momentos de acción es un atractivo extra conseguido por Webb.


Por Norberto Sica, director editorial de #IMPULSO (Clic aquí para seguirlo en Twitter).