* Efecto Grido: * concejales y funcionarios debatieron sobre la regulación para heladerías

En diálogo con IMPULSO, el intendente de Rosario, Ing. Miguel Lifschitz, aseguró que "hay que tener en cuenta no sólo el interés de los comerciantes sino también el interés de los consumidores”

Concejales de los distintos bloques y representantes del Ejecutivo Municipal se reunieron por primera vez este miércoles para analizar y debatir la regulación del mercado del helado en nuestra ciudad. IMPULSO dialogó con el intendente Lifschitz, quién expresó que hay que ser muy cautelosos a la hora de tratar este delicado tema.

Recordemos que el encuentro entre concejales y representantes del Ejecutivo se enmarca en la polémica desatada tras la llegada a la ciudad de la empresa cordobesa Grido, que con un portfolio de productos más económicos que los que se venden en la plaza local desató las quejas de las heladerías artesanales rosarinas que acusan a dicha empresa cordobesa de “competencia desleal”.

Como ejes principales se analizaron dos propuestas: fijar un número límite de locales a habilitar para todas las firmas o demarcar la cantidad de heladerías por zonas, esta propuesta fue planteada por la Cámara Industrial y Comercial del Helado Artesanal, que planteó que no sean más de 15 las heladerías que se les permita abrir en Rosario a cada marca.

La otra idea sería no tratar a toda la ciudad de la misma manera y establecer las diferencias que se viven en el centro y macrocentro en comparación con los barrios. Es decir zonificar la oferta según la demanda.

El diálogo con nuestro medio, el intendente Miguel Lifschitz expresó que “existe una regulación en materia de grandes superficies comerciales que venimos aplicando desde hace años. Ahora se pide la regulación de las pequeñas superficies. Es un tema complejo que vamos a analizar, hay que tener en cuenta la legislación provincial y nacional al respecto. Las facultades de los municipios son limitadas en este aspecto. También hay que tener en cuenta no sólo el interés de los comerciantes sino también el interés de los consumidores” remarcó el intendente.

“En esta primera reunión de trabajo que se llevó a cabo entre representantes del ejecutivo y del Concejo Municipal hemos analizado estas circunstancias, legislación comparada de otras provincias, algunos dictámenes de la Suprema Corte que han tenido y definido alguna de estas cuestiones en los últimos tiempos. Analizamos el tema técnico y jurídico. Hay que ser muy cuidadosos porque sino vamos a terminar generando una eventual caza de brujas y finalmente corremos el peligro de poner un freno al desarrollo económico de la ciudad. Entendemos el interés y la preocupación que cada uno de los sectores comerciales de proteger su actividad, pero también hay que buscar un equilibrio general”, puntualizó Lifschitz.