Cada vez que sube el dólar paralelo la gente piensa que se está escapando. Pero no siempre es así. En esta ocasión, que se fue a $560, no fue una suba. Fue oscilación alrededor del nivel real que tiene desde que asumió el Ministro Massa. El dólar paralelo no está caro, con lo cual, puede seguir subiendo sin que necesariamente sea una crisis cambiaria.
El dólar paralelo tuvo una suba vistosa que atrajo a todos los medios a titular con la suba del dólar “blue”. En junio había terminado en $490 y ahora apenas termina julio está en $560. Esto es un aumento del 14%.
Claro, pero si se considera que entre abril y junio el dólar estuvo oscilando entre $470 – $ 490, que de pronto en julio suba 14%, cuando la inflación en el mismo período estuvo en similar nivel, lleva a pensar que más que suba es un reacomodamiento.
Por eso, lo más recomendable es mirar una serie larga del dólar paralelo a precios de hoy (o sea, ajustado por inflación).Estos datos se presentan en el gráfico a continuación.
Dólar paralelo a precio de hoy
Fuente: LP CONSULTING en base a mercado e INDEC
A simple vista surge que el momento en que más caro estuvo el dólar paralelo, medido en términos reales, fue en octubre 2020 (a la salida del confinamiento estricto) cuando en términos nominales (de aquella época) estaba en $170, pero en su volatilidad casi toca los $200. Aquí es cuando la vicepresidenta Cristina le manifestó su preocupación al entonces Ministro Guzmán.
A partir de noviembre 2020 los precios internacionales de la soja y los cereales comenzaron a subir lo que trajo –por vías indirectas, obviamente– respiro en el mercado paralelo. Por esto es que la inflación siguió subiendo pero el dólar paralelo no fue acompañando. De aquí entonces que en términos reales el dólar paralelo fue cayendo hasta colocarse en lo que hoy serían $600 en abril del 2021.
Allí se mantuvo hasta febrero 2022 que, con la invasión rusa a Ucrania, los precios internacionales de la soja y los cereales tuvieron subas adicionales llegando a récords históricos en los últimos 20 años (que fueron años de precios altos). Esto, de nuevo, hizo que –por vías indirectas– el dólar paralelo siguiera bajando en términos reales.
Hasta que, a finales de junio 2022, con un dólar paralelo bastante apreciado (tenía el nivel de diciembre 2019) se produce la crisis de financiamiento del Tesoro, la salida del Ministro Guzmán, la entrada de la Ministra Batakis y una nueva corrida que lleva el dólar paralelo a $698.
Aquí entra el Ministro Massa que, más o menos, controla la situación y logra mantener el dólar paralelo en el nivel de lo que hoy son los $560 actuales.
Esto implica que la última “suba” del dólar paralelo no fue tal, fue una oscilación alrededor del nivel que tiene desde que asumió el Ministro Massa.
¿Y por el lado del dólar oficial?
Aquí la cosa es más administrada. En el momento de máximo pico del paralelo (octubre 2020) el dólar oficial está como si hoy fuera $398. Cuando se van Guzmán y Batakis es como si hoy fueran $282 / $292. Ahora está en $275.
Dólar oficial a precio de hoy
Fuente: LP CONSULTING en base a MECON e INDEC
Lo que hay que mirar aquí, entonces, es la brecha cambiaria entre el dólar paralelo sobre el dólar oficial. Mientras mayor sea la brecha, mayor presión va a haber sobre las reservas del Banco Central que, como se sabe, está exhausto de dólares.
Dólar paralelo / dólar oficial (brecha cambiaria)
Fuente: LP CONSULTING en base a mercado, MECON e INDEC
Ver la brecha en retrospectiva es interesante. En el “fatídico” octubre 2020 la brecha era de 116% y luego se mantuvo por debajo de 100%. Cuando fue la crisis de junio 2022 la brecha era de 82%. No parece muy alta. Es porque aquí la crisis fue fiscal, no cambiaria.
Con el salto que da el dólar paralelo con Batakis la brecha se va a 148%. Muy alta.
Con Massa se mueve en el entorno del 100%. Esto explica la creciente presión sobre las reservas y los malabares de las autoridades económicas para preservar el cepo y evitar (o posponer para después de las elecciones) la devaluación del tipo de cambio oficial.
En suma, el dólar paralelo no está caro.
Fuente: LP CONSULTING