Los ministros de Economía y Finanzas de los países de la Unión Europea (UE) acordaron este jueves un paquete de medidas económicas que movilizará 540.000 millones de euros en préstamos para poner en marcha a mediano plazo un fondo de recuperación que ayude a los Estados más afectados.
El grupo llegó a un acuerdo luego de que el gobierno de Países Bajos accedió a aligerar las condiciones de acceso al fondo de rescate, aunque se mantuvo firme y el texto no incluye mención a los eurobonos que reclamaban España, Francia e Italia.
Según las autoridades de la UE, la pandemia de coronavirus se traducirá en la peor caída económica de la actividad de los últimos tres cuartos de siglo.
De hecho, las consecuencias económicas del Covid-19 ya comenzaron a mostrar sus primeros signos: la economía italiana sufrió una caída del 0,5% del PBI, lo mismo que la española, mientras que la francesa tuvo una contracción del 0,2% y se prevé que Alemania caiga en recesión pronto.
En medio de ese contexto, tanto las principales potencias como los países del sur europeo, con economías más débiles y más golpeados por el virus, comenzaron a pedir la construcción de una red de seguridad a corto plazo, que hoy se acordó será para las finanzas públicas (240.000 millones de euros), empresas (200.000 millones) y trabajadores (100.000 millones).
El Eurogrupo logró este acuerdo sobre la base de un documento previo pactado entre Francia, Alemania, España, Italia y Países Bajos.
Si bien no todos los países se mostraron de acuerdo en un principio, el problema principal era el del fondo europeo de rescates (MEDE), diseñado para actuar en caso de que esta crisis acabe extendiéndose hasta la deuda soberana de los estados.
La Haya exigía que estos fondos estuvieran vinculados a la adopción de reformas estructurales para corregir los desequilibrios de déficit y deuda una vez superada la emergencia sanitaria, informó la agencia de noticias Europa Press.
El texto finalmente acordado por los ministros estableció que el único requisito será que estos préstamos se destinen a financiar costos sanitarios relacionados con el Covid-19.
Fuente: Télam