El gobierno nacional apura en estas semanas la firma de convenios con provincias y municipios para aumentar el volumen de microcréditos disponibles para trabajadores mayores de 18 años, sin garantías bancarias, que necesiten financiar insumos, máquinas y herramientas.
La idea es “masificar” el otorgamiento de préstamos de bajos montos, con tasas del 3 por ciento de interés anual, y agilizar el acceso a esa ayuda para personas con emprendimientos ya iniciados, tanto de producción, de servicios o comercios de la economía popular, explicó a Télam el titular de la Comisión Nacional del Microcrédito (Conami), Alberto Gandulfo.
El plan, que consiste en multiplicar los microcréditos que ya se gestionan a través de la Conami, fue adelantado días atrás por el ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, quien marcó como uno de los objetivos centrales de su gestión “lograr desendeudar a las familias“ y darle a la economía social herramientas para que pueda sostener y optimizar sus emprendimientos.
Los montos de los préstamos variarán “en función del tamaño del emprendimiento” y la cuota -posiblemente a 36 meses- también se establecerá “según las posibilidades reales de pago“, detalló Gandulfo.
A través de un sistema de tutorías, que realizarán egresados y estudiantes de carreras técnicas, los aspirantes a los créditos deberán acreditar su actividad y el plan de acción que justifique la compra de “herramientas, insumos, maquinarias o bienes de capital“.
Los créditos estarán destinados a quienes no cuentan con “garantías bancarias“, un universo de unos 4 millones de trabajadores independientes.
Otro de los objetivos del Ministerio de Desarrollo Social es “generar nuevos instrumentos para crear un banco propio” de esa cartera y simplificar los mecanismos para que el acceso a los microcréditos sea más ágil.
Una de las opciones en estudio -explicaron voceros de la Conami- es desarrollar una aplicación para telefonía celular, entre otras herramientas.
Télam