El gobierno de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, a través del Comité Federal de Radiodifusión, dio marcha atrás con la fusión entre las empresas de televisión por cable, Multicanal y Cablevisión, pertenecientes al Grupo Clarín. La decisión fue confirmada este mediodía por el propiointerventor del organismo, Gabriel Mariotto.
La fusión había sido aprobada el 7 de diciembre de 2007 por la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia y homolagada por el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno.
Según indica el texto de la resolución (que puede descargarse desde esta página), "se deniega la aprobación de la fusión por la cual CABLEVISIÓN S.A. absorbería a las empresas MULTICANAL S.A. Y OTRAS. Atento que el otorgamiento de la autorización no resulta compatible con el régimen regulatorio vigente de Radiodifusión".
Esta es la tercera medida que toma el gobierno nacional que afecta los intereses del Grupo Clarín. La primera fue el acuerdo firmado por el Ejecutivo Nacional y la AFA para la transmisión de los partidos de fútbol de Primera División por Canal 7 (que eran exclusivos de las señales del conglomerado). La segunda fue el recientemente presentado proyecto de Ley de Medios Audiovisuales, a través del cual siGrupo Clarín desea ingresar en el mercado del Triple Play, deberá -entre otras cosas- vender la señal de Canal 13 de Buenos Aires (lo mismo ocurriría con Telefónica, que debería desprenderse de TELEFE).
Por su parte, Cablevisión emitió en la tarde de este jueves,el siguientecomunicado respondiendo a la decisión del Ejecutivo:
En el día de la fecha, el interventor del COMFER, Gabriel Mariotto, que depende del Secretario de Medios, Enrique Albistur, se refirió públicamente a Cablevisión en una reunión plenaria de comisiones en la Cámara de Diputados, e incluso llegó a anunciar una medida que afectaría a la compañía.
Llama poderosamente la atención que Mariotto se haya referido a supuestas decisiones administrativas sin haber dado traslado y ni siquiera notificado previamente a Cablevisión. La resolución aludida carece de toda lógica y sustento legal, ya que Cablevisión cumple estrictamente la ley, tanto en lo que se refiere a multiplicidad de licencias como a todos los demás aspectos (societarios, de contenidos, etc.).
Es a todas luces evidente que tanto la oportunidad como el contenido de dicha resolución tienen el claro objetivo político de dañar a la compañía, en el marco de la discusión que comienza a darse en el Parlamento de cara a la nueva regulación de los servicios audiovisuales en el país. Esta burda estratagema discursiva, ante el plenario de comisiones, no busca otra cosa que confundir deliberadamente a los legisladores y a la opinión pública, dado el ámbito en el que la misma fue anunciada.
Todas las inversiones y las operaciones empresarias llevadas adelante por Cablevisión a lo largo de los últimos años se han ajustado estrictamente a derecho y han recibido todas las aprobaciones necesarias.
Cabe destacar que, en materia de defensa de la competencia, la adquisición por parte de Cablevisión de la empresa Multicanal fue aprobada por la Autoridad de Aplicación correspondiente, que no es otra que la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia. En 2007, tras 14 meses de análisis, dicho organismo aprobó la operación sin objeciones y por unanimidad, con los votos de los tres vocales. Esta resolución, la 257/07 de la CNDC, está vigente y absolutamente firme.
Luego de esa autorización, Cablevisión emprendió su reorganización empresaria, notificando al COMFER de la misma. Cabe destacar que la TV por cable no utiliza espectro radioeléctrico. Por ello, en cuanto a multiplicidad de licencias, la ley establece que no se computan los servicios de cable ubicados en diferentes localizaciones (arts. 43 y 44 de la ley 22.285). En 2008, Cablevisión informó al organismo su voluntad indeclinable de desistir de aquellas licencias que superaran la cantidad de una (1) por localización. Así, la compañía cuenta con una sola licencia por localidad. Este desistimiento fue voluntario, espontáneo y se llevó a cabo oportunamente, con lo cual ni siquiera hizo falta un requerimiento por parte del COMFER.
Por todo esto resulta aún más arbitraria, intempestiva e ilegal la resolución anunciada en el día de la fecha. Y por todo esto Cablevisión iniciará, una vez más, todas las acciones administrativas y judiciales que sean necesarias para resguardar sus derechos constitucionales y los de todos sus clientes.
Como sucedió hace menos de un mes con Fibertel, Cablevisión vuelve a ser víctima del abuso y el autoritarismo de quienes, al margen de la ley, pretenden no ejercer su función pública, sino utilizarla como un ariete político para esconder sus verdaderos intereses.