El Gobierno nacional le puso punto final a la Ley de Alquileres que se encontraba en curso desde junio del 2020. El tema fue conversado durante esta semana entre el Presidente Alberto Fernández y el ministro de Economía, Sergio Massa. De todas formas, hasta que no salga el decreto, la norma seguirá vigente.
La Ley de Alquileres tuvo un amplio consenso legislativo y había sido aprobada por la Cámara de Diputados durante noviembre del 2019 durante el gobierno de Mauricio Macri pero sancionada en el Senado en junio del 2020.
Esto introdujo al mercado dos cambios claves. Extender la duración de los contratos de dos a tres años y convalidar una sola actualización anual del valor mensual del alquiler de acuerdo a un índice que combina la evolución de los salarios y la inflación.
Eduardo Toniolli, diputado nacional por el Frente de Todos y referente del Movimiento Evita, señaló en Todo Pasa de Radio Boing que fue tratado en las distintas comisiones una serie de modificaciones a la ley, de las cuales salieron dos dictámenes a tratar en las Cámaras.
“El que impulsamos desde el Frente de Todos, tiene incentivos para que los propietarios pongan los inmuebles, porque es ahí donde se encuentra el problema, en la oferta. El otro dictamen, que es el de Juntos por el Cambio, propone tocar algunos artículos que a nuestro entender perjudicaba a los inquilinos y no logran mayor oferta de los propietarios”, dijo.
En ese sentido, Toniolli remarcó: “El problema no es la ley, sino la situación económica. No estoy de acuerdo con derogar la ley. Lo mejor que tuvo el debate fue que pasaron especialistas que plantearon sus argumentos y quienes conocen del tema mostraron algunos números que dan a entender que el conflicto empezó en 2017 con la depreciación de la moneda. La compraventa de inmuebles se hace en dólares, y el alquiler en pesos. Por lo tanto es imposible lograr un paralelo entre lo que se obtiene por vender o por alquiler. Por eso hubo una estampida hacia ese lado”.