Seguramente de chico lo habrá soñado más de una vez, y de grande luchó tanto que, ante las adversidades, pudo cumplirlo. Juan Cruz Komar, el defensor que hizo todo para jugar en Rosario Central, pudo cumplir su sueño de calzarse la camiseta auriazul y hacer completo su debut: arco en cero, triunfo de visitante y gran actuación para comenzar su historia en el club de sus amores.
Lo vivido tras las derrotas de Boca y sobre todo de Godoy Cruz en el Gigante ante la gente, habían creado un clima incómodo, por eso la importancia de la victoria y también de volver a acomodarse en una definición de grupo que aparenta ser pareja: “Después de dos derrotas es muy importante salir, con esta victoria nos acomodamos nuevamente ahí“, dijo el defensor.
Se sabe que el disfrute en el fútbol dura poco para los planteles en el medio de un torneo y más pensando que llegan a corto plazo partidos muy determinantes, entre ellos, el clásico: “En el fútbol tenés 24 horas para disfrutar, eso también hay que hacerlo, estoy muy contento y voy a estar feliz. Después ya llega empezar de nuevo y pensar en el próximo partido“, agregó.
Frente a Central Córdoba, había ingredientes que, para Komar, son importantes de destacar: “Creo que hay varias cosas a remarcar, veníamos de dos derrotas, hacía 35 grados de sensación térmica, mucha humedad, es una cancha difícil ante un equipo que propone un juego físico, muchas pelotas divididas. Creo que la clave estuvo en interpretar el partido, adaptarnos y ser eficaz“.
“Fue más de lo que espere para mi debut, ya que ganamos, mantuvimos el cero y nos acomodamos“. Y hasta pudo convertir: “Atajó muy bien Toselli, fue un muy buen anticipo, tuvimos después otra similar, terminó en gol y lo ganamos“. Como hincha, y después de haber luchado tanto por este momento, la casaca del debut tiene dueño: “Le pediría la camiseta a los más referentes, a Emi (Vecchio) o a Marco (Ruben). La mía se la llevo para mi viejo porque es la primera“.