La Cámara Argentina de Inmobiliarias Rurales, CAIR, publicó su último informe destacando que el mercado inmobiliario rural cayó un 47% interanual en el mes de abril.
Además, subrayó que esta es la segunda caída consecutiva del año ya que, en el marco del aislamiento social, marzo resultó el peor mes de los últimos tiempos.
“La enorme incertidumbre económica como el riesgo de entrar en default y el creciente atraso cambiario actuaron como una pinza sobre la demanda y la oferta”, analizó la Cámara Argentina de Inmobiliarias Rurales.
De todas maneras, proyectó que, una vez finalizado el pico de contagios y acordados los términos de deuda, la actividad “se vuelva a regenerar sobre una base de valores interesantes que atraigan a nuevos inversores que busquen un resguardo de su capital”.