Con hasta 16 horas de diferencia con respecto a nuestro país, las islas del Pacífico y Nueva Zelanda fueron las primeras regiones en recibir la llegada del nuevo año: se realizaron celebraciones en medio de fuegos artificiales y muchedumbres festivas.
A lo largo de este jueves y viernes, y hora tras hora, las restantes capitales de Occidente recibieron el 2010 con la esperanza de la recuperación económica y bajo un clima de inseguridad reinante tras el fallido atentado de Navidad contra un avión estadounidense.
Una de las primeras ciudades en darle la bienvenida a 2010 fue Sidney. Allí, más de un millón y medio de personas se acercaron al puerto local para disfrutar de los fuegos artificiales sobre el tradicional Harbour Bridge.
Otra de las grandes protagonistas fue París, donde se celebraron los 120 años de la Torre Eiffel, con un excepcional espectáculo lumínico y músical, que comenzó horas antes de la hora 24.
En tanto, en Berlín, cerca de un millón de alemanes circularon bajo la puerta de Brandeburgo, el símbolo de la unión alemana.
Quienes también estuvieron festejando bajo un ícono histórico fueron los londinenses, que se congregaron a los pies del London Eye, con los ojos sobre las agujas del reloj del Big Ben.
Un festejo tradicional
La capital de España, Madrid, vivió una vez más su histórica ingesta de uvas de medianoche. Como todos los años, los madrileños se llegaron hasta la Puerta del Sol, donde llenaron sus bocas con las tradicionales doce uvas.