Si hablamos de conectar dispositivos y transferir datos, USB es probablemente el método más popular, con años de penetración en el mercado que lo ha convertido en un estándar global.
Con la llegada de USB 3.0 los números han mejorado considerablemente, con una velocidad de transferencia diez veces superior a la generación anterior, pasando de 480 Mbps a 5 GBps.
USB 3.0 ya se encuentra disponible en gran parte de las nuevas computadoras y una de sus mayores ventajas no solo es la velocidad, sino la compatibilidad con equipos anteriores, lo que hace a esta forma una ganadora.
Ahora, el USB 3.0 Promotor Group anunció la finalización de las especificaciones USB 3.1, que añade mejoras para permitir SuperSpeed USB operar a velocidades de hasta 10 Gbps.
SuperSpeed USB utiliza una codificación de datos más eficiente y ofrecerá más del doble de velocidad datos que USB 3.0, y más de veinte veces la de USB 2.0, asegurando también la compatibilidad con los dispositivos actuales, uno de los fuertes de este estándar.
De esta forma, USB 3.1 entra a competir con fuerza con Thunderbolt de Intel, y con gran promoción por parte de Apple (entre otras marcas) que ostentaban la mayor velocidad del segmento con 10 Gbps.
La retro compatibilidad siempre ha hecho de USB un ganador, algo de lo que Thunderbolt carece, ya que es todavía relativamente nuevo y con poca cantidad de equipos y dispositivos disponibles en el mercado.
USB 3.1 ya está finalizado, y en breve comenzaremos a verlo en nuevas computadoras, asegurando una velocidad altísima de transferencia.