El presidente Alberto Fernández sostuvo hoy que “desde las periferias del mundo” se necesita “financiamiento genuino para el desarrollo, sin la complicidad local de quienes lo fugan a paraísos fiscales”, y pidió un manejo eficaz de los Derechos Especiales de Giro (DGS).
Durante la tercera Sesión Plenaria de la Cumbre de Líderes G20, el jefe de Estado argentino afirmó la pandemia de coronavirus “ha incrementado” las desigualdades con “especial dureza en América Latina y el Caribe”, al tiempo que señaló a reformas financieras globales como la herramienta para superar esos desafíos.
“Sin la construcción de un nuevo paradigma financiero internacional ninguno de estos desafíos será superado”, estimó.
Fernández pidió “poner al ser humano en el centro de las decisiones” y aseguró que “desde las periferias del mundo” se necesita “financiamiento genuino para el desarrollo, sin la complicidad local de quienes lo fugan a paraísos fiscales”.
Frente a los Líderes de las principales economía del mundo, congregados en Centro de Convenciones La Nuvola de Roma, el Jefe de Estado explicó que “en el caso de América Latina y el Caribe, la canalización de los Derechos Especiales de Giro (DEG) hacia la banca regional de desarrollo es clave, pues pueden capitalizarla y apalancarla, otorgar garantías anti-cíclicas y promover inversiones privadas”.
“Hago un llamamiento a todos los países para que esta oportunidad de canalización de los DEGs para el desarrollo sostenible no resulte desperdiciada por trabas burocráticas o confort hacia el statu quo. Sería trágico engrosaran reservas de países que no lo necesitan, mientras aumenta el atraso de países que necesitan financiamiento como el agua”, apuntó.
Acompañado en el plenario por el canciller Santiago Cafiero, por el ministro de Economía, Martín Guzmán, y por el sherpa en el G20, Jorge Argüello, Fernández volvió a formular el reclamo central de Argentina en la escena internacional cuando llamó a “reformular el sistema de calificación crediticia, para que la dimensión ambiental no castigue a los países en desarrollo, aumentando el costo de la deuda soberana y el pago de intereses”.
DESARROLLO SOSTENIBLE
Recordó que el segundo Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS2) convoca a “poner fin al hambre, lograr la seguridad alimentaria y la mejora de la nutrición y promover la agricultura sostenible”, y afirmó que “la Argentina reclama poner fin a las políticas agrícolas que perjudican especialmente a los países en desarrollo”.
“Desde el G20 debemos enviar un mensaje político sobre la importancia de avanzar en estas negociaciones de larga data en la Organización Mundial del Comercio (OMC), y concluir sin dilaciones este acuerdo, antes de su próxima Conferencia Ministerial”, dijo el Presidente.
“Es tiempo de construir puentes de fraternidad y dejar atrás los muros del egoísmo”, concluyó el Jefe de Estado.
Fuente: Télam