Impulso

Encontrarse con malos modales en el lugar de trabajo,en los shoppings, de vacaciones o mientras manejamos, parece ser un común denominador en la transformación hacia los no modales.

Cada vez, es más la falta de respeto entre la gente y es más la gente que se acostumbra a la falta de modales.

Debemoshacer un esfuerzopara ser más considerados y respetuosos, porlo quehay querecordar algunas reglas básicas,trespalabras mágicas que podrán ayudar a mejorar los modales, “Gracias, Permiso, y Disculpe”.

En realidad no cuesta nada dar o recibir buenos modales, esto puede cambiar el día de cualquiera, influir en el bienestar y hasta en el buen humor de las personas.

Todos deberían conocer dónde radica la diferencia entre decir algo con buenos o con malos modales. Recordemos que la diferencia estará entre caer bien o caer mal, o entre tener un buen o un mal día".

Erróneamente muchas veces recurrimos a famosas “muletillas de desesperación “, “disminutivoso cariñismos”, tan ordinarios como mundanos. Frases tales como "mi amor", "nena", "corazón", “bombón”, “chiquito” o el clásico “querido”, cuando nos dirigimos a alguien para pedir o agradecer, dejando entrever que no se practican los buenos modales. Es común que todos queramos solucionar todo, tratando de ser amables usando muletillas tan poco sinceras. ¿Es que acaso no somos capaces de recordar sólo tres palabras?

Otros errores comunes y que reflejan la falta de destrezas en el uso de los buenos modales radica en la manera de contestar el teléfono, quese percibe cuando la persona que contesta no se identifica, o cuando tutea al interlocutor sin conocerlo.

En la calle se evidencia mejor que en cualquier lugar el significado de los buenos modales. La guerra entre peatones y automóviles dan cuenta de esto, dejando evidenciar una falta total de civismo, arrojando papeles, no respetando las señalizacioneso caminando como si uno fuese el dueño total de la acera. Es común ver durante los días de lluvia cómo las personas con paraguas no ceden el paso a los que no lo llevan, monopolizando los lugares más resguardados de la lluvia. O más común aún es ver cuando se produce un encuentro entre varias personas en la calle bloqueando totalmente el paso de los peatones.

Muchos hombres creen ser educados porque permiten entrar primero a su acompañante femenino al subir a un taxi, pero obligándola a desplazarse en el asiento para dejarle lugar en vez de dar la vuelta al automóvil y subir por el lado izquierdo.

Saber comportarse cuando uno asiste a un espectáculo se basa en comprender que nunca se aplaude entre los movimientos de un concierto, o en que el aplauso premia la labor del director o demuestra el nivel de satisfacción por el espectáculo. Por tanto, recuerde no silbar y no demostrar un entusiasmo descontrolado, sólo permanezca de pie mientras aplaude y de vez en tanto grite un ¡Bravo!

En caso de llegar a una audición o a una proyección que ya ha empezado, seguramente tendrá que pasar frente a otros espectadores para encontrar su sitio, pase siempre de frente a las personas disculpándose en voz baja. En caso de que esto le suceda en el teatro deberá permanecer de pie hasta la finalización del primer acto.

"Mantener los buenos modales es un paso para volver a ser civilizados, es algo que vale la pena".