Reemplazan a los estadounidenses en el legendario bar Floridita.
El restaurante bar Floridita de La Habana, un lugar esencial para los estadounidenses que visitaban a Cuba hasta hace meses, acapara ahora la atención del creciente flujo de turistas de Rusia que recorre la capital cubana.
El local, situado en el casco histórico de La Habana, cobró fama internacional en los años ’50 al convertirse en uno de los lugares preferidos del escritor estadounidense y Premio Nobel de Literatura, Ernest Hemingway.
El autor de afamadas novelas como “Adiós a las armas” y “Por quién doblan las campanas” conquistó ese lauro el 28 de octubre de 1954 por su obra completa, poco después de recibir el Premio Pulitzer en ficción (1953) por “El viejo y el mar”.
La asidua presencia de Hemingway en el lugar quedó consolidada para la eternidad con su figura fundida en bronce sentada en uno de los asientos de la barra del Floridita.
Y esa influencia constituye un imán que atrae a cientos de turistas extranjeros y locales, aunque los viajeros estadounidenses están ausentes desde que en junio de 2019 su gobierno suspendió los viajes de crucero a los puertos cubanos.
Las leyes del embargo impuesto por Washington a Cuba en 1960 prohíben a los ciudadanos del país norteño viajar a la isla como turistas.
Pero hasta hace poco pudieron hacerlo más de medio millón de ellos en virtud de 12 categorías creadas por el gobierno de Barack Obama tras el restablecimiento de relaciones diplomáticas con Cuba en diciembre de 2014.
SALE USA ENTRA RUSIA
La ausencia de los viajeros del vecino del norte hizo perder al Floridita parte importante de su dinámica y clientela, la cual se repone de manera paulatina con turistas de Europa, Chile, México, Canadá, Gran Bretaña y otros polos emisores.
Entre ellos, los rusos muestran una creciente predilección por el local, dijo a la prensa su director, Ariel Blanco.
El gerente explicó que luego de la retirada de los estadounidenses se realizó una campaña para diversificar la oferta con diversas agencias de viajes y Rusia apareció como uno de los más importantes mercados de interés.
Los rusos viajan preferiblemente al balneario de Varadero, uno de los mejores a nivel mundial, a unos 150 kilómetros de La Habana.
Ese paquete incluye una excursión a la capital cubana, con el Floridita como plato fuerte, al contar con un menú de productos de mar, una rica oferta de habanos y una carta de bebidas encabezada por el famoso Daiquiri, la preferida de Hemingway.
El establecimiento obtuvo el “International Timeless Award” del “Tales of the Cocktail Spirit Award” como el bar de mayor aporte a la historia de la coctelería y pilar de la industria del ocio en el mundo.
Fuente: ANSA
Imágenes: Gentileza