Luego de tres años de obras de restauración y puesta en valor, la reapertura contó con una gala musical de la Orquesta Sinfónica de esa provincia. Se invirtieron más de 3 millones de pesos
El gobernador de Entre Ríos, Sergio Urribarri, participó este sábado del acto de reapertura del Teatro de Gualeguaychú, luego de finalizadas las obras de restauración y puesta en valor. Con fondos del gobierno nacional y aportes de la provincia y el municipio se concretaron los trabajos que demandaron una inversión total de 3,2 millones de pesos.
En la reinauguración se realizó una gala musical con la presentación de la Orquesta Sinfónica de Entre Ríos.
El edificio fue restaurado por completo. Las molduras, marquetería, luminarias y aberturas del hall se presentan como eran en su origen, mientras que el cielorraso, piso, paredes, butacas y el escenario de la sala también se verán como nuevos. Al frente se le reestructuró la marquesina.
El teatro de Gualeguaychú fue inaugurado hace 97 años, el 14 de julio de 1914, con la presentación de la ópera Aída de Verdi. Fue declarado monumento histórico nacional en 1997.
Los trabajos llevados a cabo incluyeron la construcción de sanitarios nuevos y ventilación de los mismos a partir de conductos metálicos y extractor eléctrico. En el sector de la platea se extrajeron los pisos de madera y se colocaron nuevos en vivaró machimbrado, cepillada y pulida, con tres manos de cera natural.
La totalidad de las 575 butacas fueron retiradas y restauradas por completo. Se colocó nueva alfombra de acceso al sector y en las galerías ya no habrá los problemas de humedad en los muros. En el sector de palcos se realizó la reparación, limpieza y pulido de los pisos de madera y se hicieron revoques y pintura. También se colocaron cortinados en pana de primera calidad de color azul.
En el escenario, se repararon los pisos de madera y se restauró el telón existente y el mecanismo de funcionamiento. En la tertulia se renovaron los pisos de madera y se colocaron mosaicos graníticos, además de restaurarse las butacas. Los camarines y sus sanitarios también fueron alcanzados por las obras de restauración.
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