El domingo 7, de 15 a 18 en el Complejo Astronómico Municipal, tendrá lugar un evento gratuito y familiar con múltiples propuestas para disfrutar de esta tradicional festividad japonesa.
Quienes se sumen a la conmemoración podrán disfrutar de una variedad de propuestas que les permitirá a rosarinas, rosarinos y turistas acercarse a esta cultura milenaria a través de sus leyendas, gastronomía, idioma, arte, juegos, música y danzas.
Será una tarde de deseos, esperanza, amor, estrellas y cultura japonesa para compartir en familia y con amigos.
Agenda
-En la sala Planetario se proyecta, en tres horarios (a las 15, 16 y 17) la función ‘Astrocuentos. Mitos y leyendas de todos los cielos’, donde una de las tres historias que se presentan cuenta sobre esta leyenda.
-En la explanada del Planetario, se llevarán a cabo distintas propuestas alusivas a la celebración:
- TANZAKU. Se invita a dejar deseos en pequeñas tiras de papel (tanzaku) y colgarlos en las ramas de los árboles.
- KIRIGAMI. Por medio de esta técnica milenaria, que se basa en doblar y cortar papel, se podrá experimentar en el armado de diversas figuras y objetos.
- SHIORI. Se podrán llevar señaladores con el nombre escrito en japonés.
– Se podrá degustar platos típicos: wagashi, onigiri y sushi.
– Habrá un espacio de juegos tradicionales.
– Y danzas típicas, con la presentación del grupo Ryushin Rosario Taiko.
Sobre Tanabata
Tanabata es una emblemática celebración japonesa que se lleva a cabo cada 7 de julio. También conocida como Fiesta de las estrellas, tiene su origen en la tradición china Qi xi, ‘La noche de los sietes’. La leyenda cuenta la historia de dos amantes: la princesa Orihime, una tejedora celestial, y Hikoboshi, un pastor de estrellas, quienes estaban perdidamente enamorados. Su amor era tan profundo que descuidaron sus deberes, lo que enfureció al Rey Celestial, que como castigo los separó.
Por ello, sólo se les permite verse una vez al año, la séptima noche del séptimo mes. Según la leyenda, estos enamorados celebran su reencuentro concediendo deseos a quienes los escriban en una tira de papel de colores (tanzaku) y los coloquen en ramas de bambú a la luz de las estrellas esa noche. Es una ocasión llena de esperanza y magia, en la que los sueños y deseos se elevan hacia el cielo estrellado.