El plenario de comisiones de la Cámara de Diputados que debate el proyecto de interrupción voluntaria del embarazo retomó este jueves la discusión con la presencia de nuevos expositores a favor y en contra de la iniciativa, cuyo dictamen se postergó hasta la semana próxima.
En la primera tanda de expositores, que arrancó a las 11, se presentaron Florencia Alvarez Travieso, Guadalupe Batallán, Vanina Biassi, Inés Rank, Lucy Grimalt, Belén Marmora, Luis Ernesto Pedernera Reyna, Mariana Romero, Alfredo Vittolo, y José Miguel Vivanco.
El plenario se retomó, luego de que este miércoles se resolviera postergar hasta el miércoles la firma del dictamen -previsto para este viernes– en una reunión de la que participaron los presidentes de bloques e interbloques de la Cámara de Diputados, ya que lunes y martes próximos son feriados.
La primera en exponer en esta tercera jornada, que fue presidida en esta tanda por la presidenta de la comisión de Mujer y Diversidad, Monica Macha, fue la investigadora del Conicet, Mariana Romero, que defendió la iniciativa y sostuvo que la legalización “nos permitirá una mayor relación entre pacientes y profesionales de confianza y empatía“.
Uno de los discursos más enfáticos de esta mañana fue el de la joven de 22 años, Guadalupe Batallán, quien -tras relatar que su madre quedó embarazada a los 15 años- rechazó de plano el proyecto y aseguró que “estamos frente al mayor genocidio universal“, al cuestionar el tratamiento ‘express’ de la iniciativa, y señaló: “Me duele mucho por la Argentina como joven lo que me va a tocar vivir“.
En tanto, José Vivanco, miembro de Human Rights, sostuvo que “la clandestinidad afecta a las mujeres más vulnerables y a las adolescentes” y consideró que “legalizar el aborto no obliga a nadie a abortar”, al advertir que de aprobarse “se aseguraría que nadie sufra innecesariamente debido a embarazos no deseados o riesgosos” y pidió: “No dejemos pasar una deuda histórica para la Argentina“.
Para Inés Franck, abogada de la Universidad Católica, “se debería tomar la vida humana desde la concepción ya que estamos ante dos vidas que hay que cuidar y proteger“ y afirmó: “No es una discusión religiosa, ni política sino técnica y jurídica“.
“Es una imposición donde no se admite que los derechos de todos deberían ponerse en discusión. Tampoco se habla de los chicos por nacer“, manifestó.
Télam