Fernando Sabag Montiel y su novia querían alquilar un departamento frente a la casa de Kirchner

Fernando Sabag Montiel, el hombre que intentó asesinar a Cristina Fernández de Kirchner, junto con su novia, Brenda Uliarte, planeaban alquilar un departamento en el barrio porteño de Recoleta que les permitiera una vista limpia hacia la propiedad de la dos veces primera mandataria de la Nación.

La información se encontraba en el teléfono celular de la detenida Uliarte y sale de una serie de mensajes de audio que se envió con el agresor, al que además acompañó hasta la zona de Juncal y Uruguay el 1° de septiembre cuando intentaron dispararle en la cabeza a la Vicepresidenta.

En la causa, hay una tercera persona detenida, Agustina Díaz de 23 años, que le habría reprochado a Uliarte a través de mensajes de texto que el atentado hubiera salido mal y que recomendó que se deshiciera de su teléfono celular para ocultar cualquier prueba incriminatoria.

La joven además insultó a Uliarte luego de haber enviado a Sabag Montiel a ejecutar el asesinato y se preguntó si fue porque se puso nervioso que no logró su cometido. La información que comprometió a Díaz hasta el punto de que fuera ordenada su detención surgió del celular de Uliarte, quien la tenía agendada como “Amor de mi vida”.

Los investigadores confirmaron además que Sabag Montiel y Uliarte habían intentado asesinar a la expresidenta el 27 de agosto, durante la noche en la que la Vicepresidenta le habló a la militancia apostada en la zona de las calles Juncal y Uruguay, donde se emplaza el edificio donde vive la titular del Senado.

“No, no es que se dé cuenta, el tema es que hay una cámara de C5N, y hay poca gente, y la gente se está yendo, y el momento es ese, ahora ya es tarde, o sea son las 12 y ella salió a esa hora, y era a esa hora, o sea el escenario era con ella porque la habrán seguido”, dice uno de los mensajes que recibió Uliarte de parte de Sabag Montiel.

“¿Entendés? Después vamos a ver en la tele a ver qué pasó porque cuando ella se metió, la siguieron y ahí tendría que haber sido”, sostiene otro mensaje detectado por la justicia.

En otra comunicación, Sabag Montiel le dice a Uliarte: “No, ya se me metió adentro y el escenario, el anfiteatro lo sacaron. Le toqué la espalda a (el gobernador bonaerense) Axel Kicillof y se metió en un Toyota Etios, eh, y se fue, un quilombo. Ella está arriba pero no creo que salga, así que ya fue, dejá, voy para allá, quédate ahí. No traigas nada”.