Fito Páez celebró en la noche del sábado el cumpleaños 70 de Charly García con un conmovedor concierto en el Teatro Colón.
Con un show de alrededor de una hora y media en la que el rosarino se apoyó por momentos en su habitual banda y en otros sumó a la orquesta estable del prestigioso teatro, sobre todo en composiciones pertenecientes a la etapa más progresiva en el repertorio de Charly García, el mundo de la música le ofreció a la mega estrella del rock nacional un nuevo homenaje como el que horas antes le dedicaran mas de 100 músicos en el CCK.
Para ello, Fito Páez echó mano a una importante cantidad de canciones de La Máquina de Hacer Pájaro, Sui Generis y Serú Girán, además de clásicos de la primera época solista de García, en los años `80.
La gran sorpresa fue que el aporte no se limitó a aquellas composiciones inspiradas en el llamado rock sinfónico, como el caso de “Instituciones”, de Sui Generis, o la poca revisitada “Rock and Roll, de La Máquina de Hacer Pájaros; sino que también lo hizo en clásicos como “Los dinosaurios” o “Demoliendo hoteles”, con inmejorables resultados.
Para la ocasión, a su habitual banda integrada por Diego Olivero, en bajo; Juan Absatz, en teclados; Gastón Baremberg, en batería; y Juani Agüero, en guitarra, Fito sumó a Carlos Vandera, en guitarra acústica y coros, quien brindó algunos matices a los arreglos de voces.
“Es una noche especialísima. Vamos a celebrar a uno de los artistas más grandes de todos los tiempos”, anunció el cantautor rosarino al ingresar al escenario.
Acto seguido sonó una fogonera versión solo con piano de “Confesiones de invierno” a la que sucedió “Yendo de la cama al living” junto con toda la banda.
Claro que entre versión y versión, Fito no se privó de manifestar su incondicional amor a Charly en el plano personal y su devoción en lo referente a lo artístico, lo cual tuvo su momento más explícito cuando lo comparó con Mozart.
Entre las canciones que contaron con arreglos orquestales brillaron “Cinema Verité”, “No te dejes desanimar”, “Estación” y “Cuando ya me empiece a quedar solo” con un guiño a “Filosofía barata y zapatos de goma” al final y, especialmente, “Los dinosaurios”.
Con su habitual banda, el rosarino desgranó delicadas y fieles versiones de “Peperina”, “No soy un extraño”, “Viernes 3 AM” y “El fantasma de Canterville”; y se puso rockero con “Pecado Mortal” y “No se va a llamar mi amor”.
En tanto que se reservó “Desarma y sangra” para un momento intimista solo con el piano.
Hacia el final apareció “I`m not in love”, la única canción del repertorio posterior a la década del `80 y una poderosa versión de “Demoliendo hoteles” con la orquesta sinfónica en plan rockero.
“Que suerte tener a Charly García y el mundo es más hermoso porque está él”, lanzó Fito en su última declaración de amor explícita.
Fuente: Por Hernani Natale para Télam