ENTREVISTA. El actor, director y dramaturgo rosarino con más de 50 años de trayectoria, dialogó con IMPULSO en medio del re-estreno de dos piezas en donde se luce actuando y, en una de ellas, también dirigiendo, con el feminismo como trasfondo.
Héctor “Piripincho” Ansaldi se luce en dos de sus facetas. Como actor protagonista en “El juicio de la manzana” -una de las dramaturgias que ganó la convocatoria del Teatro Nacional Cervantes– y como actor y director de la obra de su autoría “Las flores”, el artista junto al resto del elenco puede ser disfrutado en la icónica sala Caras y Caretas que se ubica en el microcentro rosarino, en Corrientes 1518.
En diálogo con IMPULSO y sobre el presente que atraviesa, Ansaldi destacó: “Estoy parado en medio del torbellino que significa esta vuelta después de dos años exactos en que dejamos la obra ‘Las Flores’, con la que estuvimos en escena durante 2018. Después sobrevino la pandemia, con el teatro cerrado, la imposibilidad de dar clases. Yo aproveché a escribir, filmar cosas cortas, pero por supuesto que esto no es lo mismo y se extrañaba mucho“.
Hace algunos días sucedió el gran reencuentro. “El Juicio de la Manzana”, pieza escrita por Nicolás Piazzo y dirigida por Adrián Giampani donde se luce en uno de los roles protagónicos, contó con público presente en la sala Lavardén.
Una experiencia distinta de la misma obra que, habiendo ganado la convocatoria del Teatro Nacional Cervantes, pudo visualizarse vía streaming a través del canal oficial de YouTube de aquella institución. Experiencia distinta en todo sentido, ya que aquella filmación realizada en diciembre del 2020 y lanzada en mayo de este año lo encontraba post Covid con gran agotamiento a raíz de la enfermedad.
La mirada directa de su público, que sigue extrañando el reencuentro con Piripincho ya que este año tampoco pudo realizar la temporada invernal, empieza a acompañar sus pasos nuevamente. Y las expectativas son grandes. Tan grandes como lo que significa el Caras y Caretas que hoy, protocolo mediante, sólo permite el acceso de 30 personas por función, por lo que se espera se revea la situación particular de la sala por parte del municipio. “De este modo ni siquiera llegamos a cubrir los gastos de la apertura de sala”, resaltó Ansaldi.
Allí están, sin embargo, con todo su arte digno de ser compartido, vivenciado y experienciado. Arte rosarino, con mucha deconstrucción tanto en los textos como en las apuestas, para ser re-pensar y reflexionar en sociedad.
LAS FLORES: UN MELODRAMA SARCÁSTICO PARA MACHISTAS ARREPENTIDOS
La obra trata de cuatro hermanas apellidadas Flores, cada una con un conflicto subjetivo aunque habitando un mismo universo convulso: el de la liberación femenina.
“Yo escribí la obra hace bastante. La escribí y dirigí en 2018 aunque sin actuar“, recuerda el artista, y señala a su vez el impacto tajante y dividido que tuvo en quienes pudieron apreciarla. “Los hombres captaron más el humor. Sin embargo, las mujeres me hablaron siempre desde la profundidad de las temáticas que se fueron abordando”.
El hecho de ser actuada por hombres, invita al género masculino a bucear en las aguas de otras perspectivas. Ponerse en el lugar. Empatizar: “Es un melodrama sarcástico. Se tratan los problemas que, al momento de escribir, los entendía como fantasiosos y lejos de eso, el día del estreno me enteré de una historia similar a la que se relata“. Las máximas consecuencias de ser mujer y vivir en una sociedad machista y patriarcal empiezan a sacudir la dureza de los discursos para darle lugar a la reflexión.
“Me pasó que al empezar a representar al personaje que me tocó, entrar en su piel, me puse a llorar de manera desconsolada. Yo me permito transmutar con las situaciones y entendí de verdad qué es pasar por una determinada situación. Realmente los hombres no sabemos nada de lo que se siente”, expresó. Esa transmutación junto a la algidez que caracteriza al texto se aleja de lo caricaturezco y chabacano. Sin dudas, una obra para aprovechar al máximo y seguir pensando posterior a su visualización.
Además de Ansaldi, actúan Nicolás Terzaghi, Marcos Giordano y Daniel López. Además, el equipo cuenta con vestuario de Hania Betcher, iluminación de Manuel Lafranchi y asistencia de Queila Queiroz.
EL JUICIO DE LA MANZANA: COMEDIA ABSURDA QUE CONCIENTIZA
Un hombre se atraganta con una manzana y muere. Aquello que bien podría haber sido concebido como accidente doméstico, da rienda suelta a la acusación de homicidio hacia una fruta que comienza a ser el eje de la historia de la propia humanidad.
“Desde un juicio absurdo captado desde el humor, el texto empezó a cobrar otra perspectiva al momento de actuarlo porque se lleva incluso a reivindicar a la mujer. Esta manzana se vuelve representante de todas las manzanas, y a su vez aparece Eva, como representante de todas las mujeres, a oficiar de testigo en esta causa”, adelanta el actor, que encarna al emblemático juez.
“Es demasiado corrupto, incluso se ve que se quiere sacar de encima todo esto para poder irse. Se ve cómo se vulnera a las mujeres, incluso a las personas que atestiguan para una causa“, enumeró. Pero también hay lugar para otro repensar necesario en la actualidad: el lugar de la naturaleza y el vínculo con las personas.
“Desde lo discursivo llegamos a ver el juego con la cuestión de la manzana como fruta, con la semilla, con cómo la naturaleza se la rebusca para seguir adelante más allá del hombre. Y es una invitación a pensar realmente y tomar conciencia de lo que estamos haciendo con la naturaleza“, afirma, con la certeza del quehacer de quienes deben ponerse urgentemente firmes contra lo que sucede actualmente con las islas entrerrianas y las inmediatas consecuencias de la falta de una Ley de Humedales.
En tal sentido, concluyó: “La naturaleza propone, y el hombre dispone generando una controversia todo el tiempo”. Al actor lo acompañan en escena Virginia Álvarez, Alexis Bressan, María Eugenia de Rosa, Diego Jozami y Nicolás Terzaghi. Además, Ignacio Almeyda se encarga de diseño, realización de escenografía y luces; Ramiro Sorrequieta del vestuario, María Isabel Salguero de realización y Liza Tanoni de la asistencia.
SEPTIEMBRE ENTRE FLORES Y MANZANAS
Los viernes de septiembre desde las 21:30 se puede disfrutar de “Las Flores”. En tanto, los sábados desde las 21, de “El juicio de la manzana”.
Ambas en Caras y Caretas (Corrientes 1518), que cuenta con servicio de bar, por lo que se aguarda el ingreso del público media hora antes de cada función. Las entradas para los espectáculos se reserva anticipadamente al 341-3395398, pudiendo adquirirse entradas individuales, o mesas de 2, 4 o 6 personas.
Imágenes: Gentileza Nicolás Terzaghi.