Gabriel Heinze volvió a pisar el Coloso Marcelo Bielsa pero esta vez como entrenador rojinegro. En este marco de un partido amistoso contra Godoy Cruz, el Gringo subió los peldaños del túnel que conecta los vestuarios con el césped unos minutos antes del comienzo que luego fue derrota por 1 a 0 ante Godoy Cruz.
Lejos de los trajes y las camisas, vestido con la ropa deportiva del club, de remera blanca y pantalón largo negro, apenas el DT asomó la cabeza desde los vestuarios empezó a bajar una emotiva ovación desde los cuatro costados del estadio, ocupado por más de 20 mil hinchas que se acercaron para darle la bienvenida al ídolo en esta noche de verano.
Fue el primer reencuentro medianamente formal entre los leprosos y el Gringo, con el Coloso como escenario y en formato de encuentro amistoso de pretemporada. Aunque el DT hace varias semanas que trabaja con los futbolistas, hasta ahora no se había dado la posibilidad del cara a cara.
Con los aplausos de fondo y el “olé, olé, Gringo, Gringo” que retumbó en el corazón del parque Independencia, Heinze caminó a paso lento hasta el círculo central, sin mirar demasiado hacia las tribunas y prestando atención al calentamiento de los jugadores que un rato después iban a jugar.
Newell’s salió a la cancha con Lucas Hoyos; Armando Méndez, Ian Glavinovich, Willer Ditta y Tomas Berardozzi; David Sotelo, Marcelo Esponda y Lisandro Montenegro; Francisco Gonzalez, Genaro Rossi y Ramiro Sordo.