A dos meses de la sanción de la ley de acceso a la Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE), los gobiernos nacional y provinciales se encargan de adquirir y distribuir en centros de salud de todo el país el misoprostol, el producto que permite realizar un aborto farmacológico y que debe ser suministrado por las obras sociales en forma gratuita a las mujeres que lo requieran con la correspondiente receta médica.
La norma 26.710 también prevé la cobertura integral y gratuita de la Interrupción Voluntaria del Embarazo, garantizando el trato digno, la confidencialidad, el derecho a la información y calidad en la atención, por lo cual las autoridades recordaron que quienes no logren acceder a este servicio pueden presentar sus quejas y reclamos en la página oficial.
En Santa Fe, voceros del Ministerio de Salud indicaron que las obras sociales “lo deben cubrir” y que “se consigue en las farmacias de la provincia“. También destacaron que es uno de los medicamentos que fábrica el Laboratorio Industrial Farmacéutico (LIF) de la provincia para abastecer a los efectores del sistema público de salud.
En los últimos días, la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) autorizó a LIF a producir y comercializar el misoprostol, lo que dejó al establecimiento estatal “en condiciones de proveer al resto del país un producto confiable y accesible“, resaltó la cartera sanitaria santafesina.
En Buenos Aires, la directora provincial de Equidad de Género y Salud, Sabrina Balaña, explicó que el Ministerio de Salud bonaerense realiza compras del medicamento que es distribuido “a todos los efectores de salud, tanto provinciales como municipales, hospitales, centros de atención primaria -como también a las regiones sanitarias- encargados de su distribución”.
En el caso de La Pampa, a poco de promulgarse la Ley IVE, el Servicio Médico Previsional (Sempre), la obra social más importante de la provincia que cubre a empleados de la administración pública incluyó al misoprostol en su vademécum, e informó que implementó modificaciones en su formulario terapéutico para incorporar esa droga con 100% de la cobertura.
Desde Entre Ríos, la jefa del Programa de Salud Sexual y Reproductiva, Lucy Grimalt, dijo a Télam que el Gobierno provincial “garantiza la provisión” de misoprostol a través de un programa nacional y por compra directa, y resaltó que las farmacias “cuentan con la medicación, y aún no se recibieron reclamos por negativas de obras sociales a reconocer la práctica“.
Santiago del Estero informó que el Ministerio de Salud provincial recibió por parte del Gobierno nacional el misoprostol, que ya está disponible en los hospitales de derivación para garantizar la interrupción del embarazo, según fuentes gubernamentales.
En Jujuy, las obras sociales todavía no cubren el acceso total al misoprostol, aunque se trabaja en ello y el medicamento se encuentra disponible en farmacias, dijo Claudia Martino, presidenta del Colegio de Farmacéuticos de Jujuy.
En el caso de Mendoza, fuentes del Ministerio de Salud indicaron que por ley provincial el misoprostol no se puede comprar en farmacias y solo lo puede distribuir el Estado, por lo cual la provincia abastece a los efectores con insumos propios hasta que lleguen los de Nación.
En Santa Cruz, fuentes sanitarias recordaron que el misoprostol debe ser provisto por la seguridad social o la salud pública, por lo que se esperan envíos desde Nación, mientras los hospitales los pueden adquirir como cualquier medicamento cuando la situación lo requiera.
Chubut también trabaja en la adecuación normativa para que los servicios médicos y las obras sociales locales se adapten a la nueva norma nacional, promulgada en enero.
Télam