La Selección británica ganó por 2 a 1 en tiempo extra en el estadio de Wembley y jugará contra Italia la final el próximo domingo.
Dinamarca abrió el tanteador a los 30 minutos con gol de Mikkel Damsgaard; a los 39 llegó el empate cuando Simon Kjaer batió su propia valla y a los 104min Harry Kane puso cifras definitivas.
Inglaterra cambió el curso de la historia y se metió por primera vez en la final de la Eurocopa de fútbol, al vencer en Londres a Dinamarca.
Dinamarca, la misma Dinamarca que había empezado el torneo con dos derrotas consecutivas y en el primer encuentro sufrió un golpe tremendo con el colapso de su figura, Christian Eriksen, en el campo de juego (tuvo un paro cardíaco y debió ser reanimado por los médicos), le sacaba el invicto a Inglaterra nada menos que en Wembley y ponía un pie en el final de la Eurocopa.
Inglaterra, sin embargo, tuvo respuesta y luego del empate en los noventa minutos; la definición llegó de la mano de uno de los emblemáticos jugadores ingleses; Harry Kane, en el rebote de un penal que le tapó Kasper Schmeichel cuando terminaba el primer tiempo suplementario.
De esta manera “los piratas” dieron vuelta el resultado para que los inventores del fútbol, cuyo palmarés internacional exhibe, solitario, el título del Mundial que organizaron en 1966 tengan la chance de sumar una nueva copa en su vitrina.
En la final de esta edición de la Eurocopa, que se jugó en distintas sedes del continente pero cuyo tramo decisivo se desarrolla en Londres, Inglaterra enfrentará el domingo en Wembley a Italia, que este lunes dejó en el camino a España (lo venció en los penales).
Fuente: Télam