Uruguay es un rincón en Sudamérica que ha sabido, sin dudas, capitalizar positivamente el descontento de muchos extranjeros que llegan hasta allí en busca de condiciones fiscales un poco menos agobiantes y desde luego, la posibilidad de hacer crecer sus empresas fuera de las fronteras locales.
En este sentido, aparecen facilidades muy alentadoras para quienes eligen dar el salto y comenzar a interiorizarse de cuales son los requisitos para poder ampliar sus horizontes y, por qué no, poder tener residencia en Uruguay en un futuro no tan lejano.
Cuando hablamos de residencia en Uruguay, no solamente lo hacemos referido a vivir de manera permanente en el país vecino, sino que también es una propuesta extendida que abre la puerta a las empresas que prefieran encaminar sus proyectos económicos en el país vecino.
Tras las constantes y resonantes declaraciones del presidente uruguayo, Dr. Luis Lacalle Pou, ha quedado más que clara la postura de flexibilizar las condiciones migratorias para extranjeros, sobre todo de nacionalidad argentina, mediante políticas muy claras de estímulo a la inversión que generen puestos de trabajo de calidad y crecimiento real para el desarrollo de la economía local.
El principal instrumento mediante el cual se incentiva la llegada de argentinos a este país de oportunidades, tal cual lo han definido tanto el presidente como la actual ministra de Economía y Finanzas, Azucena Arbeleche; es la considerable baja en el nivel de exigencia patrimonial que se requiere para radicarse hoy en el país oriental, y eso definitivamente ha generado un aluvión de consultas y ha hecho crecer el interés de muchos extranjeros de constituir sociedades offshore en Uruguay.
Qué entendemos por sociedad offshore
Es una denominación muy común en el mundo de los negocios, no siempre bien entendido, por eso creemos que es necesario aclarar que el término offshore, remite exclusivamente a que son empresas que residen fuera de la jurisdicción en donde reside la persona y por tal motivo, dependen del requerimiento legal del país en el que están radicadas.
De esta manera se explica el interés de muchos empresarios locales de crear una offshore en Uruguay, y jugar el juego con reglas claras, con menos presión tributaria y confiando en la estabilidad social y económica que ofrece hoy el país vecino y que incentiva la llegada de muchos empresarios en busca de escenarios menos hostiles.
Qué ofrece Uruguay que resulta tan tentador para los argentinos
Sin dudas no podemos desconocer que la cercanía con nuestro país y el idioma, son uno de los principales motivos por los cuales muchos argentinos comenzaron a mirar más allá de las costas del río de la plata.
Pero hay muchos más motivos, además del geográfico, que hacen que cada vez más empresas decidan iniciar el camino migratorio. Dentro de las más destacadas, sin dudas, debemos mencionar la actual estabilidad económica, política y social, además de la confidencialidad fiscal y bancaria que el país vecino ofrece a sus contribuyentes.
El respeto por el anonimato en las actividades financieras es otro de los puntos fuertes que muchos evalúan a la hora de elegir radicar sus bienes y ganancias en países del extranjero con políticas financieras y comerciales claras y, sobre todo estables, como Uruguay. Que no obliguen a los empresarios a cambiar las condiciones laborales a cada momento, algo que, lamentablemente, se ha vuelto muy común en Argentina.
Ir en busca de un contexto menos agresivo y con reglas de juego claras, ha sido el principal motor que ha llevado a muchos a comenzar a evaluar las condiciones necesarias para radicarse en Uruguay, y definitivamente el país ha sabido aprovechar a su favor esa necesidad creciente de muchos empresarios argentinos que, a largo plazo, serán también quienes potencien el crecimiento económico y el desarrollo de la economía uruguaya.
Cómo dar el primer paso hacia Uruguay
Cuando uno piensa en llevar su empresa a otro país, seguramente imagina un gran despliegue, un trámite engorroso y gigante. Sin embargo, el camino puede ser mucho más sencillo de lo que parece, y eventualmente darse de manera escalonada comenzando con el alquiler de oficinas virtuales, por ejemplo. ¿Cómo es esto?
Muy sencillo, mediante el alquiler de oficinas virtuales en Uruguay, una empresa puede comenzar el proceso migratorio y gozar de los beneficios fiscales, además de la credibilidad que toda empresa requiere, dirección postal y domicilio fiscal, entre otras virtudes, evitando los altos costos de tener, en una primera instancia, una oficina física.
Además, es importante mencionar que la persona física puede residir en cualquier país del extranjero, no sólo en Argentina, de esta manera se garantiza al empresario la posibilidad de acceder a todos los beneficios fiscales anteriormente mencionados, de una manera muy rápida y segura, por supuesto una vez que este cumpla con todos los requisitos legales y financieros que el país requiera.
Esto le permite, a quien quiera comenzar el proceso de migrar hacia Uruguay, agilizar los tiempos a un costo mucho más bajo, probar temporalmente la experiencia de vida en el extranjero y eventualmente, vivenciar de primera mano la actividad comercial tal como se plantea en la propuesta.
En resumen
Flexibilizar las condiciones tributarias para extranjeros ha sido, sin lugar a dudas, una gran propuesta por parte de Uruguay, que busca definitivamente establecerse como uno de los países más pujantes de la región y que pretende ofrecer grandes oportunidades de crecimiento a quienes quieran invertir y dar trabajo de calidad en el país.
Dentro de las ventajas más notables se destacan:
- Las excelentes condiciones laborales y fiscales para quienes decidan invertir capital en el país,
- La confidencialidad en las transacciones bancarias y empresariales,
- La baja en el capital inicial para comenzar la actividad en el país,
- La reducción en el monto para la compra de un inmueble, que pasó de 1.8 millones a USD 380.000
Definitivamente para quienes están analizando esta posibilidad desde hace algún tiempo, finalmente este pareciera ser el mejor momento para animarse y dar el salto de calidad hacia un escenario fértil y favorable dentro de América Latina.