Eduardo Paes, alcalde de Río de Janeiro, declaró que “ya estamos haciendo un monitoreo” sobre algunos “blocos” carnavalescos que estarían preparándose para los tradicionales festejos que reúnen a multitudes cada año en las calles de la “ciudad maravillosa” de Brasil.
Debido a la situación sanitaria que atraviesa el país sudamericano fueron suspendidos los desfiles de las “escolas do samba”, los grupos profesionales del carnaval, que se realizan en el Sambódromo Marques de Sapucaí, recuerda el alcalde.
Al mismo tiempo confieza que “no es sencillo impedir las actividades de los blocos” que son formaciones tradicionales diseminadas en los barrios cariocas en donde se reúnen los y las cariocas, generalmente disfrazados; a bailar y beber .
LA SEGUNDA CIUDAD CON MÁS CONTAGIOS Y VÍCTIMAS
La pandemia costó la vida de 227 mil personas e infectó a 9,3 millones en Brasil, mientras en Río de Janeiro se registraron 30 mil víctimas fatales y 529 mil contaminados desde el inicio del coronavirus.
“Esto es como una pelea entre el gato y el ratón” donde la Guardia Municipal recorriendo la ciudad para “punir a quien quiera hacer fiestas” y “el público se obstina en aglomerarse“, lamenta el jefe comunal.
“El problema es que estas cosas (fiestas callejeras) surgen sin mucha conciencia por parte de la gente” que parece indiferente al contagio del Covid-19 como se ha visto en las playas a dónde se volcaron millares de personas desde el verano, concluye Paes.
Fuente: (ANSA).