Comenzó la fiesta máxima del deporte mundial, Tokio 2020 ya está en marcha

Los Juegos Olímpicos quedaron formalmente inaugurados con una sobria, pero creativa y emotiva ceremonia que rindió homenaje a las víctimas de Covid-19 en todo el mundo y dejó mensajes de inclusión y solidaridad.

“Declaro abiertos los Juegos Olímpicos de Tokio”, fue la frase habitual con la que el emperador japonés Naruhito decretó la apertura oficial de la cita tras el discurso inaugural de Thomas Bach, presidente del Comité Olímpico Internacional (COI).

“Bienvenidos a Tokio. Hoy es un momento distinto al que habíamos imaginado, pero aquí estamos”, celebró el dirigente alemán en referencia a la postergación de una ceremonia que debió esperar un año como consecuencia de la pandemia.

“Los atletas hoy conviven una vez más bajo un mismo techo y ese es el poder de la unión, de la paz y de la resilencia del deporte”, agregó Bach, tras un breve discurso de bienvenida pronunciado por Seiko Hasimoto, presidenta del Comité Organizador.

“Quiero expresar mi agradecimiento a los atletas, organizadores y voluntarios por el descomunal esfuerzo y el inmenso trabajo realizado para traer los Juegos de regreso a Tokio”, completó.

“Gracias a los héroes que ayudaron a contener la pandemia, a todos los que enfrentaron este enorme desafío y a los atletas por no haber renunciado nunca a su sueño olímpico”, acotó.

El lema olímpico “más rápido, más alto y más fuerte “se multiplicará si estamos juntos y será la luz al final del túnel de una pandemia que nos distanció” (Thomas Bach).

CREATIVO, SOBRIO Y EMOTIVO

Así fue es espectáculo que brindó Tokio para celebrar el inicio de los 32º Juegos Olímpicos.

Sobresalió el ingenio con la ayuda de la tecnología al realizar un repaso de los pictogramas que identificaron desde aquellos Juegos de Tokio de 1964 hasta los de hoy, con una asombrosa muestra de creatividad que mezcló imágenes digitales con actores en vivo, una constante en toda la ceremonia, la mezcla de lo artesanal y manual con la última innovación tecnológica.

Sin dudas el momento cúlmine en importancia y emoción fue el ingreso de la antorcha olímpica.

Con música de Queen (Teo Torriate, tema que Freddie Mercury interpretó mezclando el inglés con el japonés) que luego dio paso al Bolero de Ravel, los últimos relevos incluyeron a un médico, una enfermera, como así también a un grupo de estudiantes destacados de todo el país quienes portaron la llama en los últimos metros y fue la tenista japonesa de padre haitiano, Naomi Osaka la encargada de encender finalmente el pebetero que arderá durante toda la cita olímpica.

Un momento mágico, esperado y festejado por todos.

UN DESFILE PARTICULAR

La ceremonia inaugural tuvo el tradicional desfile de las delegaciones que representan a 205 países (a las que se suma el equipo de refugiados) en 33 disciplinas, algunas de las cuales hacen su estreno en esta edición.

Un total de 11.025 atletas desfilaron encabezados por Grecia, cuna de los Juegos Olímpicos, que serán los de mayor participación femenina de la historia alcanzando un 49 por ciento del total en la que aspira a ser la edición de la inclusión y la diversidad.

Igualdad de género que buscó reflejarse también en la ceremonia de apertura con un abanderado y una abanderada, excepción hecha por una veintena de delegaciones que desfilaron con sólo uno de ellos.

Entre las excepciones se destacaron Libia, Etiopía, Yemen, Omán, Emiratos Arabes Unidos, Bangladesh, Gibuti, Brunei, Mali, Samoa y Trinidad & Tobago.

Los barbijos que lucían las delegaciones durante el desfile fueron otra postal de esta ceremonia en los Juegos que pretenden convertirse en una luz de esperanza para una humanidad golpeada por el virus.

En este caso, las excepciones fueron las delegaciones de Tayikistán y Kirguistán, que decidieron marchar a cara descubierta desafiando el protocolo sanitario.

LA FELICIDAD ES ARGENTINA

Los y las atletas de Argentina, encabezada por los abanderados regatistas Santiago Lange y Cecilia Carranza Saroli quienes ganaron la presea dorada en Vela en Rio de Janiero 2016, desfilaron  con entusiasmo en el Estadio Nacional de Tokio.

La dupla Lange-Carranaza Saroli fueron los abanderados de una festiva delegación argentina compuesta por 186 deportistas, que participarán en 26 de las 33 disciplinas que componen el evento y quienes atravesaron la pasarella deportiva con el clásico canto de “Ohh soy argentino, es un sentimiento y no se puede parar”, entre elocuentes gestos de profunda emoción.

EL ÚNICO PRESENTE

El presidente de Francia, Emmanuel Macron, único jefe de Estado del G7 presente en la ceremonia, destacó que su país “ya se está preparando para albergar los Juegos de París 2024”.

Fuente: ANSA.