La Comisión Nacional de Valores (CNV) reglamentó los Fideicomisos Financieros y los Fondos Comunes de Inversión Cerrados con el objetivo de fomentar desarrollos inmobiliarios de viviendas, créditos y valores hipotecarios para poblaciones de ingresos medios y bajos.
Según se informó desde la CNV, ambos vehículos financieros representan otro avance en la agenda estratégica que se propone vincular fondos del mercado de capitales con la economía real (producción, infraestructura, vivienda, obras públicas, entre otros sectores) en todo el país.
En particular esta medida se enmarca en el diseño de un plan de articulación interinstitucional, en el que se encuentra el trabajo conjunto, en este caso, con el Ministerio de Desarrollo Territorial y Hábitat para la promoción del ahorro doméstico vía el mercado de capitales hacia el financiamiento de viviendas.
Asimismo, señalaron que la RG 882/20, aprobada por el directorio del organismo y que entrará en vigencia con la publicación en el Boletín Oficial, fija las condiciones y requisitos para las dos instituciones de inversión colectiva previstos en el artículo 206 de la Ley 27.440.
También deberán adecuarse a la colocación por vía de la oferta pública con autorización de la CNV y estar distribuidos entre una cantidad de inversores no inferior a 20, ninguno de los cuales podrá superar el 25% del total de la emisión.
En este marco, tras cumplimentar con lo estipulado, los fondos financieros gozarán de dos beneficios impositivos muy relevantes: no tributarán ganancias sino a través de los inversores participantes y éstos pagarán por las ganancias una alícuota reducida del 15% si la inversión persiste al menos cinco años, y del 0% si se extiende a 10 años.
Durante 2020, pese a la pandemia, el organismo desplegó un plan de trabajo con una prioritaria atención a los actores de distintos sectores y a impulsar acciones que mejoren la oferta de financiamiento en toda la matriz productiva, incluida la construcción.
En septiembre pasado, el organismo creó el Régimen Especial de Productos de Inversión Colectiva para el Desarrollo Inmobiliario, destinado a la promoción de nuevos instrumentos financieros que acompañen la reactivación de diversos sectores de la economía.
Este régimen consolidó disposiciones para los Fondos Comunes de Inversión Cerrados (FCIC) y los Fideicomisos Financieros (FF), con características adaptadas a las particularidades de la industria inmobiliaria.