El tenista alemán Alexander Zverev se dobló el tobillo en medio de la semifinal de Roland Garros y tuvo que abandonar en el encuentro ante Rafael Nadal. El germano se retiró de la cancha en silla de ruedas y no pudo continuar con el encuentro por lo que el español avanzó a la final luego de 7-6 y 6-6.
Cuando el partido estaba 6-6, Rafa Nadal ejecutó una una derecha paralela y obligó a su rival a desplazarse lateralmente a gran velocidad. En ese movimiento, el pie derecho de Alexander Zverev quedó enganchado en la arcilla y se dobló de forma violenta.
El alemán comenzó a gritar de dolor ante los 14.800 espectadores que se encontraban en el Phillipe Chatrier. Los médicos ingresaron rápidamente al terreno de juego para asistirlo. Rafa Nadal también cruzó al otro lado muy preocupado por su oponente.
A los pocos minutos, el alemán volvió a la cancha con el pie derecho sin medias y apoyados en unas muletas. Se despidió del público con mucho dolor y se abrazó con Rafa Nadal.