Desde la Secretaría de Planeamiento, se trabaja en los últimos detalles para la nueva norma, que pretende dar usos específicos para las zonas ubicadas más allá del centro de la ciudad
La Secretaría de Planeamiento de la Municipalidad de Rosario avanza en firme para lanzar el nuevo Código que regule la construcción en el segundo anillo de la ciudad, más allá de las principales arterias céntricas.
La idea del Municipio es similar a lo ya realizado para el área central y el primer anillo, es decir, especificar qué uso se le puede dar a cada una de las zonas, con el fin de evitar la especulación inmobiliaria, y generar distintos esquemas de construcción.
La nueva reglamentación tendrá intervención en las calles que se extiendan al sur de Boulevard 27 de Febrer, al oese de Avenida Francia y al norte de la Usina Sorrento.
"El espíritu de esta propuesta apunta a darle a la zona su propia especificidad", explicó Mirta Levín, Secretaria de Planeamiento, a Rosario/12, al diferenciar la nueva situación con respecto a la actual, "donde se parte de la premisa que en todos los terrenos de la zona se pueden construir edificios".
El proyecto de Ordenanza ya está casi listo, pero no será envíado en el corto plazo al Concejo, donde todavía se encuentran otros proyectos de la misma cartera, como el Plan Urbano 2007/2017, que ingresó hace dos años pero aún no fue tratado.
Para realizar este trabajo, el equipo de la Secretaría de Planeamiento llevó adelante un relevamiento estadístico exhaustivo, en donde se analizaron los indicadores vigentes en todos los sectores, para luego proponer la regulación específica.
"Lo que se intenta plantear es que en determinadas zonas no es factible construir en altura, cuando hasta ahora se lo admitía implícitamente. Con esto debiera bajar el valor del suelo, después dependerá de la lógica del mercado de qué manera se traslada al precio final de las propiedades", planteó Levin.
Esta novedad se produce casi 30 meses luego de haber entrado en vigencia el nuevo Código Urbano, que generó más de una polémica en el sector de la construcción, donde los empresarios manifestaban que se le ponían trabas a la inversión inmobiliaria, por tratarse de una legislación que iba contra la rentabilidad del negocio.
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