Según indicaron, los trascendidos son “erróneos” y adelantaron que su efectivización será notificada con antelación, “remarcando el concepto de no sorprender ni buscar recaudar, sino concientizar sobre la necesidad de ordenar el tránsito y reducir los accidentes”.
“El sistema se encuentra en período de prueba y así continuará la semana entrante, permitiendo evaluar cualquier modificación necesaria a realizarse antes de su puesta en vigencia. Respecto a la velocidades permitidas, de momento, la única modificación que se evalúa es la de la velocidad máxima de calle Mendoza entre Teniente Agneta y Provincias Unidas, tramo en el que durante la pandemia se implementó un zona calma. A partir del flujo vehicular actual, la Secretaría de Movilidad estudia rectificar la velocidad máxima de 30km/h”, explicaron en el comunicado.
Por otro lado, señalaron que las otras reducciones instauradas en las vías en los últimos meses se deben a la incorporación de ciclovías y que “la política de movilidad del municipio apunta a reducir la siniestralidad a partir de la conducción prudente y respetuosa en la ciudad”.
“La intendencia reitera que las 70 nuevas cámaras tienen el objetivo de evitar las infracciones que causan siniestros, algunos de ellos de muchísima gravedad. El sistema no es recaudatorio ni se basa en sorprender a nadie, las mismas se encuentran en sitios en los que se registraron los picos de accidentes y señalizadas con cartelería para que todos los conductores sepan su ubicación y puedan evitar sanciones”, subrayaron en la carta.
Y concluyeron: “Además, serán de un gran aporte a la seguridad al leer todas las patentes de los vehículos que circulan por estos puntos, aportando información sensible a los organismos correspondientes, como por ejemplo la detección de vehículos con pedido de captura o el seguimiento de un vehículo en el marco de una investigación”.