A fin de dar cumplimiento al decreto presidencial 297 que dispuso el aislamiento total y obligatorio, la Municipalidad de Rosario reforzó las acciones de prevención y control.
En este marco, desde el 20 de marzo se clausuraron 13 comercios y se remitieron al corralón 62 vehículos en apoyo logístico a Gendarmería y Policía provincial en el control de tránsito.
Además, se realizaron inspecciones, patrullajes, ordenamientos y acompañamientos en distintos puntos de la ciudad. “El intendente Pablo Javkin ordenó la intensificación de las intervenciones de las áreas de control para garantizar una cuarentena total que permita hacerle frente al avance del coronavirus. Lo sabemos desde antes: respetar es cuidar. Y ahora más que nunca”, señaló el secretario de Gobierno, Gustavo Zignago.
En Rosario se procedió clausurar 13 comercios a través de procedimientos encabezados por la Dirección General de Inspección entre ellos un local de pagos y cobros, dos locales de cotillón, una vinería, un lavadero de autos, un local de venta de artículos para bebés, una papelera y cotillón, un bar de un minimercado de una estación de servicios, una bicicletería, una casa de artículos del hogar y repuestos electrodomésticos, un comercio habilitado como bar americano sin elaboración, heladería y oficina receptora de envíos y de una fábrica que produce artículos de caucho.
Por su parte desde el lunes 23 de marzo, agentes de la Dirección General de Tránsito realizan un apoyo logístico a Gendarmería y Policía provincial en el control vehicular en la ciudad.
Hasta entonces, la totalidad de remisiones es de 62 autos y motos cuyos titulares no pudieron acreditar la certificación obligatoria para transitar, documentación con la que cuentan aquellas personas que realizan tareas consideradas como servicios esenciales de acuerdo al decreto presidencial.