La intendenta de Rosario, Mónica Fein, dejó inaugurado este miércoles 7 el 35º período consecutivo desde el regreso de la democracia de las sesiones ordinarias del Concejo Municipal.
En su último discurso ante el cuerpo legislativo de la ciudad, hizo un balance de sus casi 8 años de gestión; destacó la gran cantidad de obras que se hicieron y están en marcha en toda la ciudad y ponderó la presencia de un Estado que “está presente en todos los barrios”.
“Gestionamos con mecanismos transparentes que nos permiten decir que en estos 30 años no tenemos una sola mancha de corrupción en nuestra gestión”, resaltó la mandataria.
Entre los opositores al gobierno local que opinaron sobre el discurso de Fein, el presidente del Concejo Alejandro Rossello sostuvo: “Hoy escuchamos un relato donde vemos una ciudad que realmente no existe. Fein tiene que hacer una autocrítica en función de las deudas que tiene Rosario”.
Por su parte, Roberto Sukerman afirmó sobre el discurso de apertura de sesiones de la mandataria que “debió hablar de los problemas de inseguridad que tiene la ciudad”. “Yo quiero ver a la intendenta con otra energía, tratando temas como pérdida de inversiones, empleo, comercios que cierran y que no pueden pagar la tarifas”, agregó Sukerman.
Por su parte Roy López Molina fue otro de los opositores que opinó: “No vamos a resolver los problemas de Rosario a nivel de seguridad, transporte, higiene u obra pública, si siempre la culpa de lo que pasa en la ciudad la tiene el otro”. “Aún hay barrios enteros sin cloacas ni pavimentos, y muchísimos rosarinos viviendo en asentamientos irregulares, todo ello sin mencionar la terrible situación de la droga, narcotráfico e inseguridad”, concluyó.