El Dr. Alejandro Chirino (MP 7420), coordinador de la Sección Infecciones Pulmonares de la Asociación Argentina de Medicina Respiratoria cuenta cuáles son las dudas más frecuentes en los consultorios médicos.
¿Qué vacuna debo colocarme?
Las vacunas utilizadas en nuestro país han demostrado buen perfil de seguridad en ensayos de aprobación y también en el monitoreo de efectos adversos durante la campaña de aplicación. No existe contraindicación para ninguna vacuna, por lo tanto, hay que colocarse la vacuna que le asignen, dado que cualquier posible efecto secundario es mucho menor que el riesgo de contraer Covid.
¿Qué pasa si se retrasa la segunda dosis?
Los ensayos clínicos donde se comprobó la eficacia de las vacunas fueron realizados con un intervalo de dosis de entre 3 y 4 semanas. Además, sabemos que una sola dosis tiene menor efectividad para reducir la mortalidad. Por lo tanto, es necesario tener el esquema completo con 2 dosis para que el efecto protector sea elevado. De aquí la importancia de completar los esquemas lo antes posible.
Ya se están desarrollando en nuestro país estudios sobre la combinación de primera y segunda dosis de distintas vacunas, se espera que en el corto plazo contemos con más datos.
¿Por qué muere la gente vacunada?
Si hablamos de pacientes con ambas dosis y que han pasado al menos 14 días desde la segunda dosis antes de presentar síntomas, podemos afirmar que las vacunas que se están distribuyendo han demostrado una gran eficacia para prevenir casos fatales. Esta eficacia no es del 100% y, como hay gran cantidad de pacientes contagiados, existe una posibilidad estadística de fallecidos a pesar de tener ambas dosis.
Con sólo una dosis, la efectividad en reducir la mortalidad es menor para todas las vacunas que se colocan en Argentina, según datos del Ministerio de Salud. Hay que remarcar que el riesgo de morir por Covid es mucho menor en vacunados que en no vacunados.
Tratamiento ambulatorio ¿Qué hacer y qué no?
Si tiene Covid, lo más importante es contactar al sistema de salud para monitorear el curso de la enfermedad.
Especialmente entre el día 6 y 10 de evolución, donde pueden aparecer signos de neumonía. En el caso de pacientes sin internación, el tratamiento es como el de un cuadro gripal y es posible que solo se recomiende reposo, líquidos, analgésicos y antiinflamatorios.
No está indicado administrar antibióticos, anticoagulantes, vitaminas u otros tratamientos, como por ejemplo la ivermectina, y muchas veces estos tratamientos pueden llegar a producir más daño que beneficio. Se ha demostrado que una de las principales causas de que aparezcan bacterias resistentes es el sobreuso de antibióticos.
¿Cuáles son las secuelas?
En pacientes leves -sin internación ni disminución de la oxigenación- puede darse el síndrome post Covid.
Se trata de casos con síntomas como fatiga, cansancio, debilidad, dolores musculares, dolor de cabeza y taquicardia, que persisten más de 4 semanas.
Lo más importante es corroborar que no haya alteraciones desapercibidas. Si los estudios son normales, el cuadro irá desapareciendo con el tiempo y no precisará de mayores intervenciones.
Los pacientes moderados a severos -internados, con oxigenoterapia o en terapia intensiva con ventilación mecánica- deben ser observados para identificar secuelas, como fibrosis pulmonar, neumonía organizada o incluso la posibilidad de tromboembolismo de pulmón.
El control clínico suele realizarse entre las 6 y 8 semanas y estos pacientes requerirán procedimientos de diagnóstico de acuerdo al criterio médico. En algunos casos será necesario indicar tratamientos específicos y toma un rol relevante la rehabilitación respiratoria, el soporte nutricional y psicológico.
Fuente: Télam