En la actualidad la seguridad es una meta a llegar en diversos espacios y en cuestiones inmobiliarias, en primer lugar la innovación tecnológica permite tener una mirada más amplia y detectar con exactitud dónde se están produciendo fallas.
Contar con datos que permiten establecer comportamientos como las horas en que se mueve más gente para aumentar la seguridad cuando más se necesite.
Sin dudas, estos procesos modernos vienen acompañados por la mejora de las comunicaciones en la nube, que posibilitan ofrecer también el servicio de monitoreo a distancia, permitiendo obtener resultados eficientes a través de la optimización de productos y servicios.
Por otra parte, las novedades vinculadas a la tecnología influyen directamente en la reducción de costos fijos ya que son sistemas integrales y eficientes, además de colaborar con el medioambiente, debido al gran ahorro energético.
LA NOVEDAD. El último elemento tecnológico creado para la seguridad de un edificio es el “Ojo del Halcón”, un sistema compuesto de un dispositivo de seguridad (tótem) situado en el acceso principal de la propiedad que permite la comunicación interactiva de los vecinos con un “vigilador” que está ubicado en la Central Receptora de Alarmas de la empresa contratada.
Desde allí, los profesionales encargados de la vigilancia controlan varias cámaras, analizan los movimientos del lugar y mediante una potente sirena y luces estroboscópicas se disuade cualquier situación sospechosa y se alerta a los vecinos ante un hecho de inseguridad, al mismo tiempo que se activa un operativo de respuesta enviando a la policía, bomberos o ambulancia según corresponda.