La Municipalidad de Rosario lanzó una campaña para concientizar a la población sobre la ordenanza N° 10.182/2021 por la cual se “prohíbe la concentración de alcohol en sangre -más de 0 gramo de alcohol por litro de sangre- para quienes conducen cualquier tipo de vehículo a motor existente en la vía pública y todo tipo de vehículo a motor registrado y homologado que se incorpore a la circulación en la vía pública”.
La campaña cuenta, en una primera etapa, con la desinteresada colaboración de trabajadores y trabajadoras de prensa de la ciudad, y en los meses siguientes, sumará a figuras del deporte y de la sociedad civil.
La campaña, que se lanza a través de un corto que se podrá ver en canales de televisión y por redes sociales, apunta a concientizar a la población a que, si se conduce, no se debe consumir alcohol durante las 24 horas. El video cuenta con la participación de Carolina Coscarelli; Gabriela Peralta; Juan Manuel Fontana; Ignacio Negri y Gustavo Rezzoaglio.
Datos sobre siniestros viales
Gran parte de los siniestros viales se producen por impericias o negligencias humanas, siendo la conducción bajo efectos del alcohol el principal causante de las mismas. Por lo menos en la mitad de los casos de muertes en siniestros de tránsito en el mundo está presente el alcohol.
Argentina registra uno de los índices más altos de fallecimientos de jóvenes menores de 29 años por accidentes de tránsito en Latinoamérica, coexistiendo entre las posibles principales causas de incidentes viales los motivos asociados al consumo de alcohol, el cual constituye el único factor medible en forma objetiva y rápida.
Según estadísticas oficiales, Santa Fe es la provincia con más alto índice de muertes viales del país: 739 muertes a hora cero, es decir en el lugar del hecho. Este número se incrementa al considerar los fallecimientos acaecidos a partir del traslado de los sujetos accidentados, los que actualmente son registrados como muerte violenta y no como muerte vial.
Los efectos del alcohol son directamente proporcionales a su concentración en sangre, presentando a mayor concentración, mayor deterioro, como ser:
0.15 a 0.2 g/l Disminución de reflejos
0.2 a 0.3 g/l Falsa apreciación de las distancias, subestimación de la velocidad
De 0.3 a 0.5 g/l Excitación emocional, disminución de la agudeza mental y de la capacidad de juicio, relajación y sensación de bienestar, deterioro de los movimientos oculares
De 0.5 a 0.8 g/l Aumento del tiempo de reacción, alteraciones en los reflejos, comienzo de perturbación motriz, euforia en el conductor, distensión y falsa sensación de bienestar, tendencia a la inhibición emocional, comienzo de la impulsividad y agresión al volante
De 0.8 a 1.5 g/l Estado de embriaguez importante, reflejos muy perturbados y retraso en las respuestas, pérdida del control preciso de los movimientos, problemas serios de coordinación, dficultades de concentración de la vista, disminución notable de la vigilancia y percepción del riesgo
De 1.5 a 3 g/l Embriaguez muy importante y notable confusión mental, cambios de conducta imprevisibles: agitación psicomotriz, fuertes perturbaciones psicosensoriales, vista doble y actitud titubeante
Más de 3 g/l Embriaguez profunda, inconsciencia, abolición de los reflejos, parálisis e hipotermia, coma, puede producirse la muerte.
Por lo tanto, toda concentración de alcohol en sangre, aún en mínimas cantidades, provoca alteraciones en atención dividida, funciones visuales y habilidades de conducción.