Londres ya no es la misma, y si bien sus clásicos puentes, el Big Ben o el Palacio de Buckingham siguen siendo iconos indiscutibles, la ciudad ha cambiado, incluyendo a la imponente The Shard, la moderna torre que se levanta como lo más alto de la ciudad.
Pero hay otros elementos clásicos de Londres que están cambiando, y son las cabinas telefónicas rojas que con el avance de la telefonía móvil perdieron su utilidad y han quedado ahora prácticamente como un elemento decorativo, lo que está modificándose en estos días.
Londres está pintando las cabinas de teléfono rojas de verde, y no es solo un cambio cosmético. Estas nuevas cabinas cuentan con paneles solares en la parte superior, y su función no es hablar por teléfono utilizando esa línea, sino actuar como estaciones de recarga de batería para teléfonos móviles.
Son gratuitas y tienen pantallas en su interior que mostrarán publicidad (como forma de monetización) y le solucionarán el problema a una gran cantidad de personas que diariamente sufren de la reducida batería en sus teléfonos inteligentes.
La tecnología avanzó y tres cuartas partes de los teléfonos que se venden son smartphones, aunque la batería sigue siendo un problema para la mayoría de los usuarios de estos equipos cada vez más multifuncionales.
La postal de Londres cambia, como los hábitos de los ciudadanos y turistas de esa ciudad.