El ministro de hacienda de la Nación, Hernán Lacunza, dijo que las herencias de Cristina Kirchner y Mauricio Macri son “no deseables”.
Sin embargo, el funcionario nacional dijo que Mauricio Macri dejará el auto en la banquina, pero con mejores posibilidades de salir a la ruta que en 2015.
MIRADA MACRISTA
El documento presentado esta semana por el Jefe de Gabinete, Marcos Peña, dice que tras cuatro años de gestión hay menor presión tributaria.
“Bajamos ganancias (sucesivas subas del mínimo no imponible, la primera en febrero de 2016, la última en agosto), bienes personales, retenciones a las exportaciones (que están dos tercios más bajas que en 2015), impuesto al cheque a cuenta de otros tributos, impuestos al trabajo para crear empleo”, dice el paper.
“También bajaron impuestos las provincias (ingresos brutos, sellos), porque aumentamos los recursos que reciben de la Nación, y les dimos certidumbre con la ley de Consenso Fiscal. Eso les permitió tener superávit fiscal a casi todas las provincias”, agrega.
Para el gobierno de Macri, su gestión deja un tipo de cambio competitivo (en términos reales, casi el doble del que heredamos en 2015), que nos permite un comercio balanceado con el resto del mundo, sin sorpresas cambiarias para el futuro.
MIRADA KIRCHNERISTA
La oposición al gobierno de Macri respondió la mirada de Marcos Peña con un documento elaborado por el Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica.
Entre 2016 y 2019:
-Cerraron 19.131 empresas.
-Se fugaron 84.100 millones de dólares.
-Se pagaron 36.381 millones de dólares en concepto de intereses de deuda.
-La inflación acumulada llega al 285%.
-La producción industrial cayó 12,8%.
-Más de 2,6 millones de personas cayeron en la pobreza.
-La inversión en equipos durables de producción cayó un 19,8%.
-La deuda externa creció 98.000 millones de dólares.
-La jubilación mínima, medida en dólares, cayó un 56%.
-El Fondo de Garantía de Sustentabilidad de la Anses perdió 45 mil millones de dólares.
-El consumo de leche por habitante cayó un 19%.