Las primeras marcas de productos alimenticios perdieron 9% del mercado en 2019, mientras que las propias, segundas y terceras crecieron 40%, según un informe del IAE Business School, escuela de negocios de la Universidad Austral.
De acuerdo con el informe, “el ciclo de contracción económica redujo la frecuencia de compra, reconfiguró las preferencias de canales y las marcas, y produjo fuertes caídas en categorías como lácteos (-11%) o refrigerados (-13%)”.
“En los últimos cuatro años, el salario siempre perdió frente a la inflación, y esto se refleja en el traslado hacia marcas B, C o Marcas Propias”, indica el informe.
Además, “el cuadro del consumo muestra importantes cambios de hábitos que se han venido consolidando en estos años difíciles: los más segmentos más altos -ABC1-, registran algún movimiento hacia marcas B, e incluso hacia marcas propias, pero al fin solo representan apenas 10% del consumo”.
Además según lo que se desprende el estudio se observan tendencias hacia productos más saludables, naturales, orgánicos y sustentables.
En cambio, agregó, “en los niveles medio bajo y bajo que absorben 87% del consumo, su principal interés es dejar de caer o simplemente sobrevivir, con los niveles de ingresos más bajos situados por debajo de los $15,000”.
Según la consultora Scentia, citada en el informe, “pañales y pizzas congeladas migran hacia marcas B, categorías como dulce de leche, crema y leche chocolatadas migran hacia B y C, en tanto quesos, margarinas, congelados de carne, sardinas y puré instantáneo son más proclives a moverse hacia marcas propias”.
ALTERNATIVAS EN EL FUTURO
El estudio también marca posibilidades de lo que viene: “la nueva administración podrá inyectar dinero por diversas vías, proponer acuerdos de precios, programas de precios cuidados y cuotas, y controlar y multar los aumentos excesivos de precios”.
Al tiempo que proyectó que “habrá que definir los programas para servir a una sociedad en su mayoría signada por la escasez, la frugalidad, las necesidades insatisfechas y el deseo de no perder o en lo posible recuperar posiciones y movilidad social ascendente”.
Fuente: Télam