Consultado si será “Presidente o nada” (en referencia a si aceptaría un cargo en un hipotético gobierno de Alberto Fernández), el candidato presidencial de Consenso Federal respondió: “Nada”. Y añadió: “Esto no significa que Consenso Federal no esté dispuesto a sentarse a una mesa de diálogo”.
En declaraciones a radio La Red, Lavagna señaló además que se sintió “incómodo” en el debate realizado el domingo pasado con vistas a las elecciones del 27 de octubre, al no poder “contribuir” en contra de la polarización.
“Es cierto que me he sentido así (incómodo) porque era poco lo que se podía contribuir en términos de disminuir la fuerte polarización que predomina en la política argentina hace ya varios años”, explicó.
Para Lavagna, “es preferible que sea más flexible el debate y que haya tiempos distintos”, aunque analizó que habiendo “seis candidatos se hace difícil manejarlo” y “es mejor que haya algo, a que no haya nada”.
El ex ministro de Economía manifestó que “hubo datos que no fueron correctos” pero que “hubo impresiones de los dos lados”, en referencia tanto al candidato de ‘Juntos por el Cambio’, el presidente Mauricio Macri; y al postulante del Frente de Todos, Alberto Fernández.
También se quejó de que a la hora de hablar de derechos humanos no se hable “del hambre, que es el principal problema hoy”.
“Que cuando nos invitan a hablar de los derechos humanos hablemos de los juicios a los militares, de las minorías de Ecuador o Venezuela, creo que, tanto por derecha como por izquierda, pareciera haber una confusión muy grande”, opinó.